Monterrey.- Durante 2025, los homicidios en Nuevo León han mostrado un descenso importante, fenómeno que autoridades estatales atribuyen al combate a la delincuencia, rubro en el que se observa un repunte significativo en el número de presuntos delincuentes abatidos por las fuerzas del orden.
En el periodo comprendido entre enero y agosto de 2025, el estado ha experimentado una reducción en los homicidios dolosos del 51 por ciento en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Mientras que en 2024 se registraron mil 098 homicidios, este año la cifra descendió a 536 casos.
Paralelamente, el número de presuntos delincuentes abatidos por las fuerzas de seguridad ha mostrado un incremento igualmente relevante.
De enero a agosto de 2024 se registraron 25 abatidos, cifra que se elevó a 81 en el mismo periodo de 2025, es decir, un aumento del 224 por ciento.
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Ante este escenario, el diputado Javier Caballero, presidente de la Comisión de Seguridad del Congreso del Estado, reconoció la labor de los cuerpos policiacos.
“Primero que nada, hay que reconocer el valor y el actuar de los elementos de las corporaciones policiacas que han estado haciendo frente a esta situación tan complicada”.
En su opinión, la reducción de homicidios es una señal alentadora, aunque advirtió que los números deben analizarse con cuidado.
“Ojalá poco a poco se esté aplanando la cifra, que siga a la baja en el tema de homicidios y en el tema de abatidos que se busquen mecanismos para llevar a la justicia a los presuntos. Pero bueno, si no hay otro camino más que enfrentar al crimen de esa manera, también mi reconocimiento para todos los elementos de las corporaciones de seguridad pública”, declaró.
Por su parte, el secretario de Seguridad estatal, Gerardo Escamilla, ha destacado que gracias al despliegue en la zona rural y a la estrategia de combate implementada con el Operativo Muralla, se ha logrado reducir el número de homicidios y aumentar la efectividad en la neutralización de amenazas.
Uno de los hechos más relevantes ocurrió en agosto de 2025, cuando 12 presuntos delincuentes fueron abatidos por elementos de Fuerza Civil en un enfrentamiento en el municipio de Doctor Coss.
Este episodio, que acaparó la atención pública, se convirtió en uno de los operativos más letales del año y reflejó la intensidad con la que las autoridades estatales han respondido ante agresiones del crimen organizado en zonas estratégicas.
La mayoría de los abatidos se ha registrado en municipios de la zona rural, donde el Grupo de Coordinación para la Seguridad, integrado por fuerzas municipales, estatales y federales, mantiene el denominado Operativo Muralla.