Ciudad de México. – El secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, Omar García Harfuch, notificó haber asegurado el santuario Black Jaguar-White Tiger, con sede en la zona de Ajusco, Tlalpan, Ciudad de México, tras las denuncias por maltrato animal que le fueron interpuestas recientemente.
El funcionario agregó que fue por mandato de la jefa de Gobierno, Claudio Sheinbaum, cómo el operativo desplegado se hizo cargo del complejo, el cual resguarda a cientos de felinos, muchos de ellos en condiciones de salud preocupantes.
“Por instrucciones de Claudia Sheinbaum y en apoyo a la Profepa, compañeros de la UMOE de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX con la Fiscalía de la CDMX, aseguraron el predio utilizado como refugio en el Ajusco, por el delito de uso indebido de suelo y maltrato animal”, escribió García Harfuch en su cuenta de Twitter.
Y fue la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (AZCARM) la que precisamente hizo la denuncia correspondiente ante la Fiscalía General de la República, puntualizando que el dueño del santuario, Eduardo Mauricio Moisés Serio, mantenía en malas condiciones a los animales, muchos de ellos con la etiqueta de especies en peligro de extinción.
“La fundación (Black Jaguar-White Tiger) tampoco cuenta con planes de manejo de vida silvestre, legal procedencia de los ejemplares, marcajes adecuados ni con ningún tipo de medidas sanitarias de bienestar para los animales, incumpliendo completamente con la normatividad vigente”, destacó AZCARM.
La dependencia publicó además un par de fotografías en las cuales figuran un par de leones sin cola; al preguntar internautas sobre esto, la Asociación afirmó que esto se debe a que los carnívoros se atacan a sí mismos para mitigar el hambre.
Por si te interesa: Black Jaguar-White Tiger: Denuncian a fundación por maltrato animal.
“Se las muerden ellos mismos por ansiedad y hambre, y sus lenguas son abrasivas y están cubiertas de una especie de pequeñas espinas (papilas), que les permiten cazar y devorar presas. Son demasiado ásperas y por eso, sin querer, ellos mismos se arrancan sus colas”, respondieron.
Los denunciantes se ofrecieron para rescatar y darles un hogar a los animales ahí resguardados, sin embargo, aun se desconoce el paradero qué tendrán las especies.