Ciudad de México.- La presidenta Claudia Sheinbaum prometió que no quedará impune el homicidio del sacerdote tsotsil Marcelo Pérez Pérez, de 50 años, quien fue asesinado el domingo de varios tiros cuando salía de oficiar una misa en el barrio Cuxtitali, de San Cristóbal de las Casas.
La mandataria federal aseguró, en su conferencia matutina, que su gobierno se coordina con el gobierno de Chiapas con el objetivo de poder avanzar en la investigación.
La titular del Ejecutivo federal, quien lamentó el asesinato del sacerdote, informó que el domingo la titular de la Secretaría de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, se mantuvo en comunicación tanto con el gobierno estatal como con las autoridades eclesiales.
“Lamentamos el homicidio, el asesinato, del padre Marcelo Pérez Pérez en San Cristóbal de las Casas. Se está haciendo la investigación.
“El día de ayer (el domingo) la secretaria de Gobernación estuvo en comunicación tanto con el gobierno estatal como con la diócesis, y con autoridades eclesiales. Estamos coordinados para poder avanzar en la investigación y que este crimen no quede impune”, dijo.
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El sacerdote Pérez Pérez, quien trabajó en la defensa de los derechos de los pueblos indígenas ante el crimen organizado, recibió amenazas de muerte; no obstante, rechazó recibir protección.
Matan a balazos al sacerdote Marcelo Pérez
El sacerdote y defensor de derechos humanos Marcelo Pérez Pérez fue asesinado a balazos ayer domingo en el interior de una camioneta, en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, al sureste de México.
El defensor de los pueblos originarios, conocido como padre Marcelo, indígena tzotzil, fue baleado en más de dos ocasiones cuando estaba en su vehículo en el barrio de Cuxtitali, sobre la calle Las Peras, ubicada al oriente de la ciudad turística de San Cristóbal de las Casas.
Alrededor de las 8:00 horas, los pobladores reportaron constantes disparos de arma de fuego e incluso alcanzaron al ver lo ocurrido.
Los testigos indicaron que el párroco fue interceptado por sujetos fuertemente armados quienes dispararon a la altura de la ventanilla de lado del conductor.
El padre Marcelo salía de la parroquia de Cuxtitali luego de oficiar misa y se dirigía a la iglesia de Guadalupe, cuando dos personas a bordo de una motocicleta le dispararon a quemarropa.