Ciudad de México.- En una jornada que será recordada en la historia legislativa del país, la Cámara de Senadores culminó el proceso de designación para la persona que encabezará la Fiscalía General de la República (FGR), otorgando el nombramiento a Ernestina Godoy como la nueva Fiscal General con una contundente mayoría calificada.
Tras un intenso periodo de comparecencias de las personas candidatas ante el Pleno, donde se evaluaron trayectorias, propuestas y visiones sobre la procuración de justicia en México, el proceso de votación se llevó a cabo durante la Sesión Plenaria de este día.
El resultado de la votación fue claro e inobjetable: 97 votos a favor, 19 en contra y 11 abstenciones, garantizando así la mayoría calificada necesaria para esta importante designación.
El Senado de la República reafirmó con esta decisión su compromiso con el fortalecimiento de las instituciones clave para el Estado mexicano y con la toma de decisiones que responden al interés superior del pueblo de México en materia de justicia.
La noticia fue recibida con entusiasmo por diversas bancadas. La Senadora Judith Díaz fue una de las primeras en celebrar el nombramiento, destacando el significado que tiene la llegada de una mujer al frente de la FGR.
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“Estamos muy contentos porque nos va a representar una mujer íntegra, trabajadora y conocedora. Es tiempo de mujeres.
“Con su designación, tendremos una Fiscal justa, que represente y defienda a todas y todos los mexicanos. Hoy en el Senado hay júbilo por este gran nombramiento”, expresó la legisladora.
La ahora Fiscal General asume las riendas de la institución encargada de investigar y perseguir los delitos de orden federal en un momento crucial para la justicia en el país.
Se espera que su gestión impulse una agenda de transparencia, eficiencia y combate a la impunidad, tal como lo exige la ciudadanía y como lo ha mandatado el Poder Legislativo con su voto de confianza.
Con este paso, el Senado no solo cumple con su responsabilidad constitucional, sino que también envía un mensaje de solidez y esperanza hacia un futuro donde la procuración de justicia se distinga por la equidad y la defensa de los derechos de todas y todos.