El lunes primero de septiembre en el Honorable Congreso del Estado iniciamos los trabajos del Segundo Año de la 77 Legislatura, con el firme propósito de ir por los consensos en beneficio de los habitantes de Nuevo León.
En todo Estado democrático, debe de prevalecer ante todo una autentica División de Poderes que nos permita a cada ente, aportar lo que nos corresponda para fortalecer a nuestro Estado.
Es trabajo de los tres Poderes, hacer de Nuevo León el Estado ejemplo que siempre ha sido, el Estado aguerrido y fuerte, lleno de progreso y liderazgo, en donde el bien común, de la ciudadanía, siempre está primero.
Si bien en el pasado, existieron grandes diferencias, hoy nos encontramos en un escenario muy diferente y positivo, en donde los tres Poderes, con su independencia, realizan sus funciones que les otorgan las leyes, realizan acuerdos a través del diálogo, la negociación y el cabildeo, ello entre las distintas fuerzas políticas.
La madurez política que se ha logrado debe prevalecer y no ser trastocada por intereses políticos-partidistas que serán una tentación conforme se acerque el año electoral, en donde los tres Poderes cambiarán.
Quienes integramos cada una de las ocho bancadas, representadas por el voto de las ciudadanas y los ciudadanos en la soberanía del Congreso de Nuevo León, tenemos la firme convicción que debemos trabajar duro para concretar reformas legislativas, necesarias que ayuden a solucionar los principales problemas que afectan al Estado.
Estoy segura que en este Segundo Año nos abocaremos a adecuar el marco normativo para contribuir en la solución de problemas de la calidad del aire, la seguridad, la infraestructura, la movilidad, la salud, la protección de las mujeres, de las niñas niños y adolescentes, y sobre todo que el Estado garantice un presupuesto que ayude a los Municipios a cubrir las demandas ciudadanas; a que las niñas, niños y adolescentes tengan una escuela digna, a garantizar la inclusión de las personas con discapacidad, y principalmente que vele por el bienestar y desarrollo de todo nuevoleonés.