Monterrey.- Han pasado seis años desde que dos personas fallecieron y tres resultaron lesionadas luego de que un joven acudiera a su escuela con un arma y atacara a sus compañeros, en el Colegio Americano de Monterrey.
Los hechos ocurrieron el 18 de enero de 2017, cuando Federico Guevara, de 15 años, logró ingresar al plantel con un revólver calibre 22. Aunque las clases comenzaron con normalidad, pronto se convirtió en una escena de terror.
Fue alrededor de las 9:00 horas cuando Guevara se encontraba sentado cerca de la puerta del salón de clases, desde donde sacó el arma que traía entre sus pertenencias y atentó contra la vida de un compañero, a quien le disparó a corta distancia, posteriormente atacó a su maestra y a otros compañeros.
Esto no fue suficiente para el atacante, ya que cuando intentó dispararse a si mismo y el arma ya no tenía balas, por lo que procedió a recargarla y dispararse en la barbilla. No obstante, sobrevivió a esto, falleciendo tiempo después en el hospital.
Cuando comenzó a recabarse información sobre estos hechos, se constató que el arma que el menor utilizó para cometer el ataque pertenecía a su padre, con la que practicaban la caza de animales.
Este hecho conmocionó incluso a medios internacionales, sobre todo cuando en redes sociales se viralizó un cortometraje grabado por el circuito cerrado ubicado en el salón, en el que se podía observar todo lo que había sucedido durante el ataque.
Han pasado seis años de estos hechos que cambiaron la vida de las víctimas mortales y los heridos, y aún así, el motivo de este ataque continúa siendo desconocido.
Los sobrevivientes
Luis Fernando recibió un balazo en la cabeza, herida que le provocó una disminución en la movilidad y del habla, sin embargo, luego de terapias logró salir adelante.
Ana Cecilia también fue herida de bala en la cabeza, no obstante, sus secuelas fueron menores que las de Luis Fernando, ya que sólo permaneció un mes internada y posteriormente logró continuar con su vida sin heridas físicas.
Manuel Chávez sólo fue rozado por una de las balas, por lo que fue dado de alta el mismo día del ataque.