Monterrey.- El gobierno de Monterrey decomisó 155 kilogramos en artículos de pirotecnia durante el 23 y 24 de diciembre dando un total de 549 kilogramos asegurados a través de operativos en el municipio.
Dichos operativos iniciaron desde el pasado 24 de noviembre con el inicio de esta temporada decembrina, las revisiones fueron encabezadas por la Dirección de Comercio municipal en conjunto con elementos de la policía regia.
Los 155 kilos que se decomisaron solo en estos dos días festivos se encontraron objetos explosivos como cebollitas, brujitas, paquetes de luces de bengala y palomas que se encontraban a la venta en vía pública.
La retención del material explosivo y la revisión de puestos ambulantes y comercios informales, se fundamentó en las fracciones II y XVII del artículo 42 del Reglamento para el Uso de la Vía Pública en el Ejercicio de la Actividad Comercial, esto de acuerdo a lo compartido por el gobierno municipal.
Algunos de los operativos fueron colocados en calles del centro de la ciudad, como en Colegio Civil, 5 de Mayo, 15 de Mayo, Garibaldi y en las avenidas Félix U. Gómez, Colón, Francisco I. Madero, Conchello, Ruiz Cortines y Cuauhtémoc.
Mientras que en el sur de la capital del estado las revisiones a puestos se concentraron en Carretera Nacional, Eugenio Garza Sada, Lázaro Cárdenas, Junco de la Vega, Revolución, Alfonso Reyes y avenida Del Estado.
En Nuevo León está prohibido el uso de pirotecnia en eventos sociales como desfiles, posadas y festejos navideños desde el pasado 13 de diciembre de 2022, tras las quejas de alrededor de 60 organizaciones de la sociedad civil.
Así lo dio a conocer Alfonso Martínez, secretario de Medio Ambiente Estatal, argumentando que también es una actividad que afecta de manera directa a la calidad del aire en la zona metropolitana de Monterrey.
Este año se publicó el pasado 15 de diciembre la prohibición del uso de pirotecnia nuevamente en el Periódico Oficial del Estado e incluso se dio a conocer que quien fuera sorprendido utilizando dichos productos explosivos sería acreedor a una multa de entre ocho mil hasta un millón de pesos.