Guadalupe.- Policías municipales de Guadalupe lograron la captura de un hombre señalado como presunto responsable de una serie de robos con violencia en tiendas de conveniencia en la zona metropolitana, principalmente, en los municipios de Apodaca y Guadalupe, en Nuevo León.
El detenido fue identificado como Edgar Eliud “N”, de 27 años de edad, a quien se le atribuyen al menos ocho atracos cometidos en un periodo de mes y medio. De acuerdo con las investigaciones, el hombre utilizaba una pistola de juguete para amenazar a empleados de tiendas de conveniencia, con el fin de despojarlos de dinero en efectivo y mercancía.
La detención ocurrió este domingo, luego de que elementos municipales atendieran un reporte al número de emergencias 9-1-1 sobre una supuesta compraventa de drogas en la colonia Cañada Blanca. Al llegar a la calle Tepetongo, en el cruce con Valparaíso, los oficiales detectaron a un hombre que coincidía con la descripción de personas señaladas en anteriores atracos.
Al notar la presencia de los policías, el sospechoso intentó huir hacia su domicilio, pero fue rodeado y sometido por los uniformados. Tras realizarle una revisión preventiva, se le aseguraron 20 dosis de una sustancia con características similares al cristal y una báscula digital, presuntamente utilizada para la venta de narcóticos.
La Secretaría de Seguridad Pública de Guadalupe informó que Edgar Eliud “N” fue puesto a disposición del Ministerio Público por delitos contra la salud y que además se le investiga por su probable participación en la cadena de asaltos cometidos recientemente en la zona metropolitana, especialmente en Guadalupe y Apodaca.
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De acuerdo con los reportes oficiales, este sujeto operaba solo y aprovechaba horarios con poca afluencia de clientes para someter a los trabajadores de las tiendas. Aunque utilizaba un arma falsa, las víctimas declararon haber sentido un fuerte temor por las amenazas recibidas durante los atracos.
En un video de las cámaras de vigilancia de una de las tiendas asaltadas se puede observar como el presunto delincuente se aprovechaba que no había clientes para ingresar a la tienda y obligar a la empleada para que sacara la caja registradora y, de esta forma, quedarse con todo el dinero en efectivo que había en ella para después huir del sitio.