Ciudad de México.- A tres años del fallecimiento de Fernando del Solar, exconductor de Venga la Alegría, finalmente se dieron a conocer los detalles de su testamento.
La noticia ha generado gran interés en el medio del espectáculo, especialmente por la ausencia de Ingrid Coronado en el documento y en la lectura oficial, lo que abrió un nuevo capítulo en la disputa por la herencia del presentador argentino.
De acuerdo con Anna Ferro, viuda de Fernando, Coronado no asistió al proceso testamentario porque no se encontraba en territorio mexicano.
“Se tendría que haber presentado como tutora legal de los hijos. No se presentó, estaba en otro país”, explicó en entrevista para Sale el Sol.
Ferro añadió que fue la propia Ingrid quien solicitó abrir el documento bajo las instancias legales correspondientes, aunque finalmente no acudió a la cita.
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La dote incluyó a los padres del conductor, a su esposa, a sus hijos y a su hijastra. Los beneficiarios serían Anna Ferro y su hija, Paolo y Luciano Cacciamani Coronado —fruto de la relación con Ingrid—, así como Norberto Cacciamani y Rosa Lina Servidio, padres de Fernando. Con ello, se confirma que la herencia será distribuida entre su círculo más cercano.
Ferro también aseguró que Fernando nunca dejó desamparados a sus vástagos, incluso en los momentos más difíciles de su lucha contra el cáncer y durante el proceso de divorcio.
“Jamás los dejó desamparados ni desprotegidos como se ha dicho”, expresó, desmintiendo versiones que lo señalaban como distante de sus responsabilidades familiares.
Sin embargo, Ingrid Coronado habría manifestado su inconformidad con el testamento, principalmente por la designación de Anna Ferro como albacea. Este punto se convirtió en uno de los más polémicos, pues implica que la viuda tiene control sobre la administración de los bienes heredados.
La disputa también se trasladó al terreno legal. Coronado mantiene procesos contra Ferro para recuperar un departamento que, según ella, pertenece a sus hijos Luciano y Paolo. Ferro, por su parte, sostiene que la propiedad fue una donación hecha en vida por Fernando, lo que complica aún más el conflicto.
Este enfrentamiento entre la exesposa y la viuda del conductor refleja la complejidad de los procesos sucesorios en figuras públicas, donde las diferencias personales y legales se entrelazan con la atención mediática.
La revelación del testamento de Fernando del Solar no solo aclara quiénes son sus herederos, sino que también expone las tensiones familiares que persisten tras su partida.
