Estados Unidos.- Los planes de Taylor Swift y Travis Kelce podrían sufrir modificaciones para poder tener una boda mucho más fastuosa y llena de lujos.
Aunque inicialmente harían una ceremonia íntima en la mansión de la cantante en Rhode Island (invirtiendo 1.7 millones de dólares para que luciera perfecta), ahora contemplan otra sede para una segunda ceremonia.
La razón es la gran cantidad de amigos que quieren que los acompañen en este momento de sus vidas. De acuerdo al medio británico Page Six, la primera opción es mantener la ceremonia íntima en la mansión de Taylor y hacer una segunda en el Ocean House Hotel, en Watch Hill, ubicado al lado de su propiedad.
Sin embargo, también piensan en cambiar totalmente la ubicación y optar por realizar la boda en la Blackberry Farm, en las montañas de Tennessee, con motivo de poder albergar a los invitados de una lista que ha ido creciendo.
Esta segunda opción está tomando fuerza, ya que Taylor Swift sigue teniendo una casa en Nashville, y el lugar es mucho más apropiado para lo que se prevé sea la boda del año.
Te podría interesar
Cabe recordar el enlace de Taylor Swift y Travis Kelce reunirá a dos mundos, ya que, además de sus amistades de la infancia, estarán personalidades de la industria musical y del futbol americano.
Además, Taylor Swift quiere una gran celebración, por lo que ha planeado una serie de actividades adicionales con sus mejores amigas, incluyendo viajes a modo de despedida de soltera.
Revelan cifra millonaria que invertirán Taylor Swift y Travis Kelce en su mansión para su boda
Nuevos detalles han salido a la luz sobre los preparativos del esperado enlace entre Taylor Swift y el jugador de la NFL Travis Kelce, una de las parejas más seguidas del momento.
De acuerdo con información publicada por The Sun, ambos estarían destinando más de un millón de dólares para realizar modificaciones importantes en la mansión que la cantante posee en Rhode Island, con el objetivo de convertirla en el escenario ideal para su boda.
Según el medio británico, Swift desea ampliar considerablemente el jardín de la propiedad, ya que ese sería el lugar elegido para llevar a cabo la ceremonia.
Aunque en un inicio la pareja consideraba casarse en el extranjero, terminaron cambiando de plan al concluir que su residencia les brinda mayor privacidad, comodidad y control sobre cada detalle, algo fundamental para ellos.
