Monterrey.- La actriz y cantante argentina Flor Bertotti volvió a desatar euforia en Monterrey durante la noche del jueves, al presentarse con gran éxito en el Auditorio Citibanamex como parte de su gira Otra Vuelta, un recorrido musical que revive la esencia de su icónico personaje en la telenovela Floricienta.
Cientos de fans regios se dieron cita para reencontrarse con la intérprete, quien regresó a tierras norteñas después de dos años desde su última visita a México.
Desde antes de que las luces se apagaran, el ambiente ya era de total emoción. Y cuando Flor apareció en el escenario interpretando el tema de apertura, la respuesta del público fue inmediata y estruendosa:
“¡Flor hermana, ya eres mexicana!”, corearon cientos de asistentes, dando inicio a una velada cargada de cariño, nostalgia y energía.
En esta ocasión, Flor subió al escenario acompañada por cinco músicos, una corista, cuatro bailarines y una producción dinámica que incluyó más de 10 cambios de vestuario, lo que dio al espectáculo un ritmo visual vibrante y lleno de color, muy en sintonía con la estética característica de Floricienta.
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Uno de los momentos más emotivos de la noche ocurrió durante la interpretación de “Haz un cuento”.
Mientras Flor cantaba, los fans que se encontraban en las primeras filas comenzaron a levantar fotografías de la artista cuando era niña, imágenes que ella reconoció al instante.
Al verlas, la cantante se conmovió hasta las lágrimas, recordando sus primeros pasos en la industria y aquel gran sueño de convertirse en una estrella. Entre ovaciones, Flor agradeció profundamente el gesto, visiblemente tocada por la sensibilidad del público regio.
A lo largo del concierto, temas como “Ay amor”, “Mi vestido azul” y “Un enorme dragón” encendieron el auditorio, con los asistentes cantando, bailando y reviviendo escenas que formaron parte de su infancia y adolescencia. Cada canción reforzó la conexión emocional entre la artista y sus seguidores mexicanos, quienes demostraron que el fenómeno Floricienta permanece intacto.
Por supuesto, la noche no estaría completa sin la emblemática “Flores Amarillas”. Con los primeros acordes, el recinto se transformó en un mar dorado, con fans levantando flores reales y luces que hicieron del momento un estallido de emoción colectiva.
Al finalizar, Flor Bertotti agradeció el cariño incondicional del público regio y prometió volver muy pronto. Su presentación en Monterrey no solo fue un concierto lleno de nostalgia, sino una experiencia profundamente emotiva que reafirmó el lazo especial que mantiene con sus fans mexicanos.