Monterrey.- Minutos antes de las 19:45 horas, el Estadio Banorte se iluminó con un video proyectado en las pantallas, en el que truenos y destellos visuales marcaron el comienzo de una gran noche con la presentación de AFI, grupo encargado de abrir el concierto de Linkin Park.
La emoción alcanzó su punto máximo cuando, entre luces y efectos especiales, Linkin Park apareció en el escenario en punto de las 21:11 horas para iniciar el show con "Somewhere I Belong", sorprendiendo a todos los asistentes.
A lo largo de la noche, la banda interpretó algunos de sus más grandes éxitos, incluyendo "The Catalyst", "Waiting For The End", "Lost", entre otros temas que hicieron vibrar a los espectadores.
El público no dejó de corear cada canción, creando una atmósfera de nostalgia y emoción que se sintió en cada rincón del recinto.
Uno de los momentos más esperados por todos fue la participación de Emily Armstrong, la nueva vocalista de la banda, quien se unió a la agrupación en septiembre de 2024, por lo que esta fue su primera vez en la ciudad.
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Con una energía brutal y una potente voz, Armstrong conquistó a los asistentes, demostrando que su integración al grupo ha sido una decisión acertada.
Su interpretación, en conjunto con el resto de los integrantes, fue recibida con entusiasmo por los fans, quienes ovacionaron cada uno de los temas.
Además de la impecable ejecución musical, la producción del espectáculo fue un elemento clave para hacer de esta una noche inolvidable.
Pantallas colocadas estratégicamente arriba de la agrupación las cuales proyectaban diversas imágenes que complementaban cada interpretación, sumergiendo al público en una experiencia visual única.
Los efectos de luces y el sonido contribuyeron a la magnitud del show, haciendo que cada detalle se sintiera cuidadosamente planeado para impactar a todas las personas que se dieron cita al Estadio Banorte.
Con este concierto, Linkin Park cerró su ciclo en México de una manera inigualable, dejando una marca imborrable en sus seguidores.