Reino Unido.- Hoy, 16 de octubre, se marca el primer aniversario luctuoso de Liam Payne, el talentoso músico que conquistó al mundo como miembro de One Direction y en su exitosa carrera en solitario.
A un año de su partida, mientras el foco mediático recuerda sus éxitos en los escenarios, proponemos mirar más allá del ídolo pop para descubrir una faceta menos conocida, pero profundamente significativa de su vida: su pasión por el arte.
Recordamos hoy su legado, explorando cómo esta íntima pasión por el arte le ofrecía un refugio personal y una vía para expresar la complejidad de sus emociones.
Un Homenaje a One Direction, Pintado con el Corazón
La pintura no era solo un hobby para Liam, sino un medio para honrar las etapas más importantes de su vida. Una de sus obras más conmovedoras fue la que dedicó a sus excompañeros de One Direction. En 2023, la pieza se hizo pública gracias a su colaboración con la organización benéfica Choose Love, que apoya a refugiados.
El cuadro, incluso capturado en un video del proceso creativo, muestra a los cinco miembros de la banda parados juntos en el escenario, vistos de espaldas. El público, que podría esperarse vibrante, está retratado en tonos pastel abstractos. Esta elección no fue casual: la obra es una metáfora visual de su intensa, pero a menudo aislada, experiencia de compartir la fama mundial, creando un recuerdo de unidad separado del clamor exterior.
Regalos que Hablan de Amistad y Hogar
La sensibilidad de Liam también se manifestaba en los regalos que hacía a sus amigos. Eleanor Calder, exnovia de su compañero Louis Tomlinson, compartió una tierna anécdota tras su partida. Como parte de su emotivo homenaje, Calder reveló que Payne le pintó a sus perros como un gesto para ayudarla a sentirse más cómoda en su casa.
"Dijo que esperaba que eso le ayudara a sentirse como en casa", escribió Calder. Este detalle demuestra la profunda empatía de Liam, que utilizaba su talento para brindar consuelo y calidez a sus seres queridos, un lado humano que contrasta con la imagen de estrella de rock.
El Retrato Real y su Respeto por la Tradición
Incluso los iconos de la cultura británica inspiraron su trabajo. Tras el fallecimiento de la Reina Isabel II, el retrato que Payne pintaba de la monarca atrajo la atención de los medios.
El artista compartió la obra, un óleo sobre lienzo de 1.4 metros de altura, todavía inacabado, y reveló que le había dedicado unas 50 horas de trabajo. Con un sencillo mensaje
"Descanse en paz, Su Alteza Real"–, Liam demostró su respeto por la tradición británica.
De manera similar, una acuarela anterior dedicada al Duque de Edimburgo reflejaba su aprecio por las figuras nacionales de su país. Estas obras evidencian que el lienzo de Liam Payne era tan amplio como su mundo.
¿Una Ventana a su Lucha Contra el Aislamiento?
En medio de las incógnitas que aún rodean el caso Payne, los seguidores ha tomado sentido a as obras del cantante que parecían ser una ventana a su lucha contra el aislamiento que a menudo acompaña al estrellato. Recordemos que Liam era apenas un adolescente cuando One Direction (1D) se convirtió en una sensación global, vendiendo millones de discos y acumulando legiones de fans conocidos como "Directioners".
Sin embargo, esa exposición masiva tuvo un alto costo, y Payne comenzó a lidiar públicamente con los altibajos y las presiones extremas de la fama. En el silencio de su estudio, lejos del clamor de los escenarios, el arte pudo haberle ofrecido un espacio seguro para procesar la compleja realidad de ser una estrella mundial y, quizás, una forma de expresar lo difícil que resultaba sentirse conectado cuando se vivía bajo el constante ojo del público.
