México.- Cada 24 de agosto circula una de las creencias más curiosas y misteriosas de la cultura popular: “el diablo anda suelto”. Frases como esta se repiten año con año, generando temor, bromas y hasta advertencias.
Pero, ¿de dónde viene esta tradición y qué significado tiene realmente?
El 24 de agosto y San Bartolomé
El origen de esta creencia está vinculado con el día de San Bartolomé Apóstol, que se celebra precisamente el 24 de agosto. En la tradición católica, este santo fue uno de los doce discípulos de Jesús. A este santo se le conoce por el poder de proteger contra los malos espíritus y librar a las personas de la influencia del demonio.
Según la creencia popular, relata que San Bartolo fue retado por el diablo en una carrera donde Lucifer falleció ahogado en un río y por ello, cada 24 de agosto volvería para vengarse. Por lo tanto, la idea de que diablo queda “suelto” para tentar y hacer travesuras queda al mismo tiempo que , San Bartolomé es quien lo controla y lo mantiene bajo vigilancia espiritual.
Creencias y supersticiones populares
Durante este día existen ciertas creencias que a lo largo de los años las personas recuerdan, estas van desde hechos inusuales, sobrenaturales, hasta accidentes y graves fenómenos meteorológicos.
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Lo que la gente dice:
- No salir de noche, porque se cree que es más fácil ser “tentado” o tener mala suerte.
- Evitar pleitos o discusiones, ya que el diablo “anda provocando”.
- Protegerse con oraciones o escapularios, como parte de las prácticas religiosas heredadas.
Incluso, los antiguos agricultores creían que era una mala jornada para la agricultura, pues pensaban que los "espíritus malignos" causaban fenómenos que podían destruir sus cosechas.
Aunque hoy en día muchas personas lo toman en tono de broma, todavía hay quienes prefieren ser más precavidos durante esta fecha.
El verdadero origen de la creencia de "El Diablo anda suelto"
Más allá de las creencias populares y religiosas, esta historia puede contener una explicación científica a los posibles hechos que puedan ocurrir ese día con fenómenos meteorológicos.
Por un lado, se encuentra la canícula, aquella temporada del año en la cual el calor es más fuerte en el Norte y tiene una duración de 40 días, antiguamente se creía que iniciaba el 14 de julio y terminaba el 24 de agosto justo en el día de San Bartolo. Mientras que, la temporada de ciclones es el periodo que inicia desde el 1 de junio hasta el 30 de noviembre y donde existe una mayor probabilidad del desarrollo de fenómenos meteorológicos (huracanes, depresiones tropicales, ciclones).
Entre mito y tradición
La idea de que “el diablo anda suelto el 24 de agosto” se ha vuelto parte del folclore mexicano y latinoamericano. Para algunos, es simplemente un dicho curioso que se repite cada año; para otros, es un recordatorio de mantener la fe y cuidarse de las “malas energías”.
Lo cierto es que, mito o realidad, esta frase sigue vigente y cada agosto vuelve a aparecer en conversaciones, redes sociales y hasta en los titulares de noticias.