Monterrey.- Escalofriantes, terribles, preocupantes, así son las imágenes de un aficionado de México con un cuchillo buscando apuñalar a otro seguidor azteca durante el juego entre la Selección Mexicana y Qatar, dentro de la Copa de Oro, celebrado el pasado domingo en el Levi’s Stadium, de Santa Clara, California.
El seguidor logró su objetivo, apuñaló al otro seguidor y le dejó una seria herida en el pecho, que sangraba profusamente, por lo que tuvo que intervenir la autoridad para llevarse emergencia al herido a un hospital, mientras se calmaban los ánimos en la tribuna.
Lamentablemente, este tipo de incidentes violentos son más comunes en el futbol, donde cada semana hay incidentes de violencia, broncas, golpes o amenazas que hacen pensar a muchos si es bueno asistir a los estadios.
“Inaudito lo que sucedió ayer en el Estadio de Santa Clara. Un tipo con un cuchillo en plena tribuna involucrado en una trifulca. Esto no es culpa del futbol. El futbol es “inocente” en este sentido y tampoco podemos objetar que la selección mexicana ande mal para justificarlo. No, estas “bestias” están inmersas en nuestra sociedad. ¡Qué miedo!”, escribió el periodista David Faitelson, de ESPN, en redes sociales, sobre el grave incidente ocurrido el domingo en el estadio de Santa Clara.
En la Jornada 1 del torneo de Apertura 2023, ya hubo un incidente que lamentar en el futbol mexicano, pues aficionados de Xolos de Tijuana y Pumas de la UNAM, se agarraron a golpes en la tribuna, en un acto que no pasó a mayores gracias a la oportuna intervención de las autoridades.
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Antes, el 22 de abril en el mismo Estadio Caliente, de Tijuana, ocurrió una bronca campal en las afueras del inmueble, cuando un grupo de seguidores de los Xolos, sabiéndose en superioridad numérica, golpearon de forma salvaje a seguidores del León. Por este incidente, el Caliente solo recibió aviso de veto, ¿Se vetará ahora sí el estadio tras un segundo evento violento?
El incidente más violento ocurrido en México fue el 5 de marzo del 2022, cuando en un juego entre Gallos y Atlas, aficionados de Querétaro golpearon salvajemente a un pequeño grupo de seguidores Rojinegros, con un saldo de 26 heridos, 3 de ellos de gravedad, así como 72 detenidos.
Al cumplirse un año de la bronca, ningún detenido se quedó en la cárcel, el asunto finalizó con un año de veto al Estadio La Corregidora e impidiendo que las porras visitantes acudieran a los estadios visitantes, un reglamento que se violó constantemente por las barras.
Monterrey no se salva de la violencia
La enfermedad que significan algunas posturas de las barras o porras argentinizadas en la ciudad, provocó que el 23 de septiembre del 2018, integrantes de la barra La Adicción, de los Rayados y los Libres y Lokos, de los Tigres, se enfrentarán en una pelea campal en la Avenida Aztlán, previo a la edición 117 del Clásico Regiomontano.
En el enfrentamiento, seguidores a bordo de un auto Lincoln en color gris, intentaron atropellar a seguidores de Tigres, mientras un aficionado felino fue salvajemente golpeado, un acto que puso en riesgo su vida.
Es tiempo de poner un alto a la violencia, algo para lo cual deben ponerse de acuerdo autoridades y equipos, si es que quiere evitarse una tragedia mayor.