Australia.- La Selección Femenil de Estados Unidos quedó sorpresivamente eliminada del Mundial en los Octavos de Final con la validación de un penal polémico a manos de su similar de Suecia y con ello se cierra una era en el combinado de las barras y las estrellas.
Luego de quedar empatadas 0-0 en el tiempo reglamentario, y a pesar de generar más de 10 disparos a gol que la arquera Zecira Mušovic logró contener, las estadounidenses no pudieron en la tanda de penales y terminaron cayendo 5-4 ante las suecas que celebraron en la cancha y en el vestidor la hazaña realizada.
En el último cobro de Lina Hurtig, la portera estadounidense Alyssa Naeher contuvo el disparo, pero una revisión en el VAR permitió verificar que el balón había traspasado la línea de gol concretando la eliminación, donde previamente las veteranas estrellas Megan Rapinoe, Kelley O’Hara y, además de la joven atacante, Sophia Smith erraron sus opciones.
Y es que en la historia de los mundiales, el equipo femenil de Estados Unidos nunca había terminado abajo del tercer lugar, incluso llegaron a esta justa como bicampeonas de la Copa del Mundo y esperando cerrar ciclos de algunas de sus futbolistas con la conquista de una tercera copa, algo que ya no pudo ser.
Una de las jugadoras más emblemáticas del combinado de las barras y las estrellas es sin duda Megan Rapinoe, quien dice adiós a su carrera como futbolista dejando un legado difícil de superar: dos Copas del Mundo, Balón Oro, Tricampeona de Concacaf, Medallista de Oro en Londres 2012, entre muchos otros logros deportivos; aunque su mayor huella quedará como luchadora incansable en pro de la igualdad salarial, de los derechos LGBT+ y contra el racismo.
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Con sus 34 años, Alex Morgan es otra de las futbolistas que podría unirse a la lista que decidan retirarse de la Selección. La imagen de la futbolista llorando y lamentando la eliminación muchos la consideran como un adelanto de un anuncio de que este Mundial de Nueva Zelanda y Australia 2023 pudo significar su última participación.
Kelley O´Hara, quien falló uno de los penales decisivos, así como la guardameta Alyssa Naeher, ambas con 35 años, son otras dos seleccionadas norteamericanas que podrían dejar su lugar a las nuevas generaciones.