Estados Unidos.- Las Medias Blancas de Chicago perdieron 4-1 ante los Tigres y se adjudicaron la nueva marca de derrotas en una temporada en la historia del béisbol de las Grandes Ligas.
El equipo de Chicago encajó su derrota 121 de la campaña con solo 39 victorias, dejando detrás el empate que mantenía con los Mets de Nueva York de 1962, para quedarse con el indecoroso registro.
Las Medias Blancas han tenido récord negativo en cada mes durante la temporada y tras la pausa del Juego de Estrellas, que marca la segunda mitad de la campaña, suman apenas 12 triunfos y 50 derrotas.
Este difícil recorrido llevó al despido del dirigente cubano Pedro Grifol, pero nada mejoró con la dirección de Grady Sizemore, quien tomó su lugar.
La ofensiva de las Medias Blancas ha sido un desastre, con la menor cantidad de imparables entre todos los equipos, lo que les otorga el peor promedio de bateo colectivo (.221) y el último lugar en porcentaje de embasarse (.278), según datos de la MLB.
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Además, es el único club que aún no alcanza las 500 carreras anotadas (494) o remolcadas (472) en la temporada y apenas tienen 130 jonrones y 225 dobles.
Andrew Vaughn ha sido el principal hombre de su alineación con promedio de bateo de .246, con 19 vuelacercas y 69 remolcadas.
La labor ofensiva de las Medias Blancas también se vio afectada por las lesiones del cubano Luis Robert, quien tras un 2023 en el que bateó 35 jonrones, no ha podido jugar 100 partidos este año y solo ha conectado 14 cuadrangulares; así como la del también cubano Yoan Moncada, que ha jugado 12 compromisos.
Si su ofensiva ha sido pésima, el picheo también ha estado en cerca de ese punto, con un porcentaje de carreras limpias permitidas de 4.71, el más deficiente en la Liga Americana y el número 28 entre los 30 equipos en las Grandes Ligas.
Las Medias Blancas suman solo 20 rescates en 57 oportunidades, desperdiciando 37 ventajas en la última entrada, que le hubiesen dado la victoria.
En el picheo, Garrett Crochet, quien hoy lanzó cuatro entradas en blanco, con marca de 6-12 y 3.68 de efectividad, ha sido el punto luminoso.
Antes del inicio de la campaña, las Medias Blancas dejaron ir a Dylan Cease, su as desde el montículo; y también perdieron a Liam Hendriks. A ninguno de los dos, Chicago pudo suplirlos.