Filtran la última foto con vida del hombre que fue llevado muerto al banco por un préstamo

En el video que se hizo viral, la mujer dice a su tío "tienes que firmar", mientras empleados del banco y clientes observan atónitos.

Mujer lleva a hombre muerto al banco para firmar un préstamo en Brasil
Mujer lleva a hombre muerto al banco para firmar un préstamo en Brasil Créditos: Especial
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Río de Janeiro. – Días después de que se registrara un hecho insólito en Brasil, donde una mujer llevó a un cadáver al banco para sobrar un préstamo, fue filtrada en redes sociales la última foto con vida de este individuo identificado como Paulo Roberto Braga

Y fue precisamente la misma mujer, Erika de Souza Vieira Nunes, quien capturó estas postales en forma de selfie donde se le puede ver junto a su tío de entonces 68 años, dentro de una sala de hospital.

Esas fotografías fueron tomadas el 15 de abril, fecha cuando el hombre fue dado de alta después de haber sido atendido por un problema de neumonía que lo hizo recibir cuidados especiales.

Última foto con vida de Paulo Roberto | Especial 

Un día después, el martes 16 de abril entre las 11:30 horas y 14:30 horas, se presentó el fallecimiento de Paulo Roberto, cuyo cadáver no fue tratado por especialistas sino después de que su sobrina lo trasladara al banco, ante la mirada incrédula de empleados y demás clientes.

Aunque Erika de Souza Vieira Nunes declaró que su tío aún estaba vivo en ese momento que quedó captado en video, los peritos insistieron lo contrario dada la rigidez y otros síntomas que presentaba su familiar.

Por lo anterior, la mujer brasileña se encuentra detenida por los presuntos delitos de vilipendio de cadáver e intento de hurto con fraude, sin embargo, su equipo de abogados pelea por devolverle la libertad argumentando que la femenina necesita medicación, puesto que padece depresión y es madre de una niña con “retraso en el desarrollo fisiológico normal”.

El clip antes descrito se hizo viral en cuestión de minutos y en él se puede escuchar cómo Erika dice: “Tío, tienes que firmar. Yo no puedo firmar por ti”, mientras que un empleado bancario refuta diciéndole: “Creo que no está bien”, antes de reportar este evento a las autoridades.