Monterrey.- Para satisfacer la demanda de agua en el futuro, Nuevo León requiere una serie de nuevos planes que sorteen la escasez que actualmente padecen sus ciudadanos.
Durante la rueda de prensa donde compilaron las acciones del Fondo Ambiental Metropolitano de Monterrey (FAMM) en sus primeros 10 años, los líderes de esta organización destacaron el Plan Hídrico Nuevo León 2050, que originalmente fue entregado en 2018, pero el panorama de bajos niveles de recurso en la actualidad les obliga a replantear.
“Estamos entrando al año ocho de escasez de agua/sequía, eso nos debe obligar a encontrar otras fuentes de información que nos ayuden a tomar mejores decisiones”, mencionó el director del FAMM, César Chávez.
Según explicaron, las medidas que se están adoptando para preservar el vital líquido en la ciudad se están haciendo en coordinación con Agua y Drenaje de Monterrey.
Estas incluyen elementos como lineamientos para el uso de aguas tratadas, la influencia del cambio climático, manejo integrado de cuencas y un análisis conjunto para pronosticar la situación del agua en el futuro.
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“No es solamente el reúso de las aguas tratadas en las plantas de tratamiento actuales que trabaja agua y drenaje, estamos hablando de la incorporación de todas las posibles fuentes de aguas tratadas”, añadió.
El presidente Alfonso Garza Garza detalló que están en proceso de entrega de los contenidos del plan renovado, los cuales estarán terminados a más tardar en mayo de 2025.
“Hoy tenemos prácticamente terminado uno de los capítulos, que es el de oferta y demanda. Ya estamos a punto de entregarlo, yo creo que esta semana, a Agua y Drenaje”, señaló.
Los líderes del FAMM catalogaron que la demanda actual en Nuevo León está siendo cubierta en ocasiones de manera irregular por las autoridades.
Según el reporte de presas de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), al estado se le está suministrando más de 16 mil litros por segundo.