Monterrey.- Aunque la creación de los corredores verdes tuvo la intención de mejorar las áreas públicas, regresar espacios a la ciudadanía y llamar a la convivencia social, su mantenimiento no se ha garantizado.
Hace casi un año dio inicio la modificación de las banquetas en distintas calles del primer cuadro, y las obras han continuado hasta meses recientes como parte del programa Revive el Centro, del ayuntamiento de Monterrey.
Dicho plan incluye la arborización, ampliación de áreas peatonales, instalación de bancas y luminarias, también con miras al Mundial de Fútbol de 2026, puesto que Nuevo León será sede y se espera la llegada de centenares de turistas.
Además, las construcciones están pensadas para favorecer a los vecinos de zonas aledañas, con tal de que tengan lugares de esparcimiento en los que puedan convivir, moverse, hacer deporte y disfrutar de la cultura y la naturaleza.
En un recorrido realizado por ABC Noticias se observaron descuidos en los mismos, pues lucen con maleza, hierba crecida, vegetación seca e incluso basura.
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Ese es el caso de la calle Modesto Arreola, desde su cruce con Héroes del 47, hasta Cuauhtémoc. Al inicio del recorrido, se encuentran apilados sacos de escombro y adoquines que no han sido utilizados.
Por ello, se puede asumir que el sitio ha sido visto como un basurero clandestino, pues adicionalmente tiene ramas secas, bolsas de plástico y tela, así como una tarima de madera en desuso, justo al lado de un asiento recién establecido por el municipio. Del otro lado del mismo, yace una cubeta con vidrios rotos, que fue dejada en el lugar.
En múltiples puntos, las jardineras muestran hierba de hasta unos 40 centímetros de alto, luego de las lluvias del mes pasado.
Así mismo, es fácil observar la acumulación de basura que es arrojada al piso y va a dar a las pequeñas áreas verdes, como si se tratara de un lugar en abandono.
Si bien no se trata de un corredor verde, el camellón de la calzada Madero, a unos kilómetros de distancia, se encuentra en las mismas condiciones.
En el cruce con la calle Vicente Guerrero, por donde cruzan los peatones, hay un registro sin tapa de donde salen más ramas secas, con tal de alertar a quienes circulan a pie, para evitar un accidente.