Ciudad de México.- Un par de meses después de haberse mostrado con “unos kilitos de menos” a consecuencia de sus problemas de salud, Rebecca Jones compartió fotos de cómo luce actualmente y mandó un mensaje a sus fans.
"Ya sé que estoy muy delgada, pero bien dice (el escritor Antoine de) Saint-Exupéry: ‘lo esencial es invisible a los ojos’. (Y créanme, ocho días en terapia intensiva adelgazan a cualquiera, ya los recuperaré) (...) Esa es la menor de mis preocupaciones, ahora solo sé que cada día estoy más fuerte y sana".
De igual manera, aprovechó la ocasión para desmentir los rumores de que su salud ha empeorado.
“No pido un milagro como algunos dicen por ahí, porque sé que Dios siempre está conmigo. No, tampoco estoy ‘luchando’, porque todos luchamos día con día por vivir”, explicó.
En noviembre del 2022, Rebecca Jones se enfrentó a un fuerte problema de salud: unas bacterias se “estaban comiendo” una parte de su pulmón, lo que la llevó a sufrir una neumonía.
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Por esta enfermedad, la actriz tuvo que ser internada en terapia intensiva e intubada, además de que le retiraron una parte de dicho órgano.
El pasado 5 de marzo, la intérprete de 65 años usó su cuenta de Instagram para compartir con sus fans su asistencia a un evento especial: una “premiere privada” de su película “Nada que ver”.
Rebecca sufrió de cáncer hace años
En agosto del año pasado, Alejandro Camacho dio a conocer que su ex esposa luchachaba de nuevo contra el cáncer.
“Rebecca está perfectamente bien, está trabajando, está con salud. Efectivamente tiene cáncer, pero es una mujer tan fuerte y tiene tanta fortaleza que está perfecta”, declaró ante la prensa.
En 2021 Rebecca Jones recordó que nunca hubiera querido que el público se enterara que tenía cáncer, pero era necesario informarlo.
“Como me iba a ausentar, el público tenía que saber, de ahí la prensa se agarró para decir cosas tan malvadas, tan horribles, tan faltas de responsabilidad. Sobre todo, lo que más me molestaba es que siempre recalcaban que era mortal”, contó en aquel tiempo.
En 2017 a la actriz se le detectó cáncer de ovario y tras practicársele una cirugía y diversos tratamientos de quimioterapia, dos años después logró erradicarlo.