Luego de 40 minutos sin goles, los Rayados aprovecharon la tanda de penales para marcar un gol y con ello llevarse el tercer Clásico Regio de la temporada y acortar distancias con Tigres en la categoría Powerchair.
Cabe mencionar que en esta modalidad de futbol adaptado a personas en silla de ruedas. Los partidos se juegan a dos tiempos de 20 minutos cada uno y si hay empate el juego se define en una tanda de penales.
Desde el arranque de partido el ambiente fue vibrante con las porras de ambos equipos en las gradas, batucada, banderas y jerseys inundaron el gimnasio del Colegio Americano, sede del encuentro.
Cada equipo, conformado por cuatro jugadores en la cancha, disputó el esférico de poder a poder, dándose varios duelos individuales.
Tigres es quien tuvo las primeras llegadas a la meta de su rival, sin embargo, dos grandes atajadas en el primer tiempo evitaron que abriera el marcador.
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El segundo tiempo fue dominado por los Rayados que estrellaron un balón en el poste, la jugada más clara durante los 40 minutos.
Al silbatazo del árbitro y con el marcador 0-0 no había otra alternativa, elegir a los mejores cobradores para buscar quedarse con el triunfo.
Precisamente fue Rayados por conducto de Rubén Sánchez, el equipo que se puso al frente con un cobro perfecto enviando el balón al ángulo inferior derecho del portero.
Posteriormente le mismo Rubén fue el encargado de cubrir su portería logrando detener cuatro disparos a los felinos.
"Los primeros dos derbis, Tigres se había llevado el resultado, pero ahora este tercero era nuestra obligación ganarlo", expresó Rubén Sánchez, el jugador más valioso del encuentro.
La historia no ha terminado pues en la temporada el triunfador es aquel que gane cuatro de siete duelos, hoy Tigres tiene la ventaja 2-1 pero Rayados ya demostró que puede vencer a los felinos.