Monterrey.- Martín Demichelis ha demostrado ser un jugador polifacético. Como defensa central, debutó en primera división con River Plate, equipo con el que conquistó dos títulos de liga. Sin embargo, en su primer torneo como profesional, el 'Micho' hizo algo por lo que la afición lo recuerda con especial cariño: se puso de portero por unos minutos.
Y no fue en cualquier partido. Sucedió en un clásico frente a Racing, un encuentro crucial, ya que la victoria acercaba a los Millonarios al título del Torneo Clausura 2002. A cinco minutos del final del partido, el arquero Ángel David Comizzo fue expulsado y Ramón Díaz, entrenador del equipo, ya había realizado los tres cambios permitidos. Fue entonces cuando Demichelis, con valentía, se puso los guantes justo en el momento en que La Academia se preparaba para ejecutar un tiro libre.
El disparo de Claudio Úbeda pegó en la barrera, y River Plate aprovechó para armar un contragolpe. Nelson 'Pipino' Cuevas condujo el balón hasta el área rival, quedando mano a mano con Gustavo Campagnuolo. El delantero paraguayo dejó atrás al portero argentino y marcó, al minuto 44, el gol que selló el triunfo de River Plate.
Ese partido impulsó al equipo de La Banda, que dos jornadas después se coronaría campeón del Clausura 2002 en Argentina. Gracias a esa breve, pero memorable actuación en la portería, Demichelis se ganó aún más el cariño de la afición rojiblanca.
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