Orlando.- Con un empate de 0-0 y sin una gran cantidad de acciones de peligro, Tigres afrontó el primero de dos episodios ante Orlando City en los Octavos de Final de la Copa de Campeones Concacaf.
Los felinos visitaron Florida con un funcionamiento que quedó a deber, pues apenas registraron un disparo a portería en todo el encuentro.
Esa acción se dio hasta el minuto 70, pues Sebastián Córdova impactó desde la media luna del área, pero el arquero Pedro Gallese reaccionó y desvió el esférico.
Más allá de esa oportunidad, el cuadro auriazul apenas vio disparos que pasaron desviados del arco de Orlando, sin peligro para el portero peruano.
Si bien Tigres tuvo poco peligro en ofensiva, la misma tónica siguió el conjunto estadounidense, aunque ellos vieron tres impactos a puerta. El primero vía Robin Jansson, el segundo de Ramiro Enrique y el último Martín Ojeda, pero en todos respondió Nahuel Guzmán.
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Apenas en los primeros minutos del partido se dio una acción controversial en torno al arbitraje, pues Juan Pablo Vigón sujetó a un oponente dentro del área, pero Walter López, árbitro central, no sancionó una pena máxima que protestaron los jugadores de Orlando.
Robert Dante Siboldi buscó cambios en su plan inicial al darle acceso a Fernando Gorriarán y Ozziel Herrera, en los lugares de Vigón y Diego Lainez al 64’.
Más tarde realizó de nuevo una doble modificación, pues al 75’ ingresaron Nicolás Ibáñez y Jesús Garza por André-pierre Gignac y Javier Aquino. Su último cambio, faltando 12 minutos para los 90, fue el de Juan Brunetta por Córdova.
Este resultado no favorece a Tigres, pues solamente la victoria el próximo 12 de marzo en el cotejo de Vuelta, que se dará en el Estadio Universitario, les sirve para avanzar.
Un nuevo empate sin goles alargará la serie, mientras que una igualdad con anotaciones los dejará eliminados, gracias al gol de visitante que favorecería a los de Óscar Pareja.