Ciudad de México.- Patricio “Pato” O’Ward vivió un día especial en el Gran Premio de México 2025, al completar la primera sesión de entrenamientos libres con el equipo McLaren.
El piloto regiomontano fue uno de los grandes protagonistas de la práctica en el Autódromo Hermanos Rodríguez, donde terminó en la posición 13, en su única oportunidad del año de conducir un monoplaza de Fórmula 1 frente al público mexicano.
“Me sentí muy bien. Estamos contentos por completar nuestro programa y siempre es una chulada subirme a uno de estos autos”, comentó el piloto de 25 años, quien ocupó el asiento de Lando Norris durante la P1 como piloto reserva.
¿Qué dijo Pato O'Ward en el Gran Premio de México?
O’Ward, quien actualmente compite en la IndyCar con el mismo grupo de McLaren, expresó su emoción por volver a rodar ante su gente.
“La afición es especial y cada año que regreso me emociona regresar a casa, porque realmente es la única oportunidad que tengo de subirme a un auto frente al público mexicano”, declaró.
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El regiomontano destacó la calidez de los aficionados que llenaron las gradas del Autódromo, en un fin de semana donde él es el único representante mexicano en pista tras la ausencia de Sergio “Checo” Pérez.
“No, la verdad que es una experiencia muy linda, igual que el año pasado. Estoy contento de haber ayudado al equipo para ver qué podemos sacar este fin de semana”, agregó.
¿Pato O'Ward forma parte de McLaren en Formula 1?
Aunque su función en Fórmula 1 es limitada, O’Ward cumple un rol importante en la estructura de McLaren, proporcionando información técnica y datos de telemetría que ayudan en la configuración de los autos de Norris y Oscar Piastri, ambos candidatos al título de pilotos esta temporada.
“Mi trabajo es apoyar al equipo y aportar todo lo que pueda. Son oportunidades que disfruto muchísimo, sobre todo aquí, en casa”, dijo.
El piloto mexicano se mantiene como una de las grandes promesas del automovilismo nacional, mientras la IndyCar analiza la posibilidad de celebrar una fecha en México en los próximos años.
Por ahora, Pato disfruta el momento y se queda con el cariño de una afición que, una vez más, le demostró que el Gran Premio de México también tiene su ídolo local.