Santiago.- El nuevo ciclo de Rayadas comenzó oficialmente sobre el césped. Amandine Miquel dirigió este martes su primera sesión de entrenamiento con el plantel, en una jornada marcada por sonrisas, cercanía y bienvenida colectiva. La estratega francesa ingresó a la cancha entre pasillos formados por jugadoras que aplaudieron su llegada, reflejando un ambiente de integración y apertura ante esta nueva etapa.
Miquel no estuvo sola. A su lado apareció Amaury Messuwe, su auxiliar técnico, quien también vivió el mismo ritual de recibimiento por parte del grupo. Ambos corrieron entre líneas de futbolistas que los saludaron con entusiasmo, generando un momento simbólico donde el cuerpo técnico y las jugadoras comenzaron a construir una conexión que será clave para el proyecto que arranca.
Primer entrenamiento con enfoque en intensidad
En el campo, la sesión se enfocó en dinámicas de activación, recorridos cortos y ejercicios orientados al ritmo, así como en interacción directa con futbolistas. Miquel se mostró participativa, cercana y comunicativa, marcando el tono de trabajo que pretende establecer desde los primeros días: un equipo intenso, unido y convencido de competir en lo más alto.
A esta estructura técnica también se suma un nuevo integrante: David Patiño, quien se integrará al equipo de trabajo para aportar experiencia, análisis y acompañamiento en el desarrollo futbolístico del proyecto. Su incorporación amplía la base metodológica del club y fortalece el soporte en tareas tácticas y estratégicas, dando forma a un staff con perfiles complementarios.
Objetivos y energía positiva en el arranque
El objetivo del club es claro: evolucionar desde el banquillo, consolidar una identidad competitiva y potenciar una plantilla que combina experiencia, juventud y ambición. Con Miquel al frente, Rayadas inicia una etapa donde la exigencia, el orden y la idea ofensiva serán parte de la agenda de trabajo.
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La energía del primer día fue positiva. Las jugadoras mostraron confianza y disposición, celebrando la llegada del cuerpo técnico y dejando ver un grupo ansioso por empezar a construir bajo nuevas órdenes. La presencia conjunta de Miquel, Messuwe y Patiño permite al equipo comenzar inmediatamente con conceptos, roles y procesos de adaptación interna.
A partir de aquí, el trabajo continuará para establecer ritmo, estructura y estilo que Miquel quiere imprimir. Habrá sesiones tácticas, análisis individual y preparación enfocada en el próximo torneo. Lo cierto es que Rayadas ya inició una nueva etapa, y su primera sesión dejó un mensaje claro: el proyecto está en marcha y la conexión entre staff y jugadoras comienza con ilusión.