San Nicolás de los Garza.- Guido Pizarro llegó para dirigir a Tigres a partir de la Jornada 11 del Clausura 2025, justo después de enfrentar al Necaxa en el Estadio Victoria. Desde entonces, el 'Conde' no solo asumió el reto de comandar a los auriazules, sino que convirtió el Estadio Universitario en una auténtica fortaleza para el equipo en el torneo local.
Pizarro ha tenido un inicio soñado como técnico en casa. De los cuatro partidos que dirigió en el Volcán durante la fase regular, Tigres ganó los cuatro, logrando un paso perfecto ante su afición. Pero no solo eso: en la Copa de Campeones de CONCACAF también mantuvo su racha ganadora en casa, venciendo 3-1 al Cincinnati en Cuartos de Final y 3-2 a Los Angeles Galaxy, confirmando que el Estadio Universitario volvió a rugir con fuerza bajo su mando.
El éxito de Pizarro como entrenador no parece ser coincidencia. Así como lo hizo durante años como referente dentro de la cancha, ahora desde la banca ha encontrado la fórmula para cerrarle las puertas a los rivales. En el torneo local, Tigres solo recibió dos goles en casa bajo su dirección, mostrando una solidez defensiva destacable. En la Concachampions, aunque recibió tres tantos, el equipo logró resolver los partidos con autoridad, demostrando que sabe sufrir y manejar los encuentros decisivos.
El Estadio Universitario siempre ha sido un escenario imponente, pero con Pizarro al frente se ha consolidado como un verdadero bastión para los auriazules. Su liderazgo, conocimiento del plantel y capacidad para transmitir intensidad han sido claves para mantener el paso perfecto en casa, lo que llena de ilusión a la afición de cara a la Liguilla. Ahora, Tigres buscará extender esta racha en las fases finales, donde el apoyo del Volcán será fundamental para soñar con un nuevo título.
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