San Nicolás de los Garza.- Una noche única se vivió en el Estadio Universitario. Tigres y Tigres Femenil se enfrentaron en un partido amistoso lleno de sonrisas, convivencia y espectáculo, donde los protagonistas cambiaron de roles y la afición —13,448 personas— disfrutó de una velada diferente y memorable.
André-pierre Gignac defendió el arco de uno de los equipos, mientras Nahuel Guzmán, fiel a su estilo, jugó como delantero. Antes del silbatazo inicial, el ‘Patón’ lanzó la frase que marcó el tono del encuentro: “¡Al que pierda le toca la carnita!”, provocando carcajadas en ambos equipos.
Los árbitros fueron Pedro Martínez Losa, entrenador de Tigres Femenil, y Guido Pizarro, director técnico del equipo varonil.
El equipo de Gignac como portero estuvo conformado por: Ceci Santiago, Antonio Carrera, Sabrina Enciso, Jesús Garza, Jaqueline Ovalle, 'Chicha', Cordinalli, Guerrero, Loroña y Marcelo Flores.
Uno de los momentos más esperados fue ver en acción a Ángel Correa. Aunque aún no debuta oficialmente, el argentino compartió equipo con Itzel González, Aquino, Anika, Pizzuto, Vigón, Rómulo y 'Nico' Ibáñez, dejando una grata impresión en su primer contacto con la afición en la cancha del 'Volcán'.
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La noche fue una celebración felina. Más allá del marcador, el encuentro demostró la unión entre ambas escuadras, el buen ambiente que se vive en el club y la conexión que Tigres tiene con su gente.
Al finalizar, jugadoras y jugadores se acercaron a las gradas para convivir con la afición, regalar camisetas y agradecer el apoyo. Y antes de despedirse, Nahuel tomó el micrófono una vez más y soltó la última carcajada de la noche:
“¡Gordo! (Gignac) Anda por tu equipo… porque debemos la carne asada”.
Una noche para el recuerdo: con goles, bromas, abrazos y el corazón pintado en amarillo y azul.
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