Monterrey.- El 28 de julio de 2024, en la Summer Cup, Bárbara Olivieri vivió un episodio especial en su carrera. Con la camiseta del Houston Dash, la atacante venezolana marcó el gol que selló la victoria ante Tigres Femenil, en un duelo internacional que aún se recuerda por la intensidad y la rivalidad que despertó entre ambos equipos.
Aquel tanto tuvo un sabor particular para Olivieri, quien conocía de primera mano la pasión de los clásicos regiomontanos tras su paso por Rayadas. En conferencia de prensa, lo expresó con sinceridad:
“Sí, me encantó, no sé si sabes, pero jugué un año en Monterrey con Rayadas, entonces sé que está esa rivalidad. No quise celebrar mucho, pero si se siente muy rico anotar contra un equipo que era mi rival en un momento, la verdad se siente nice”, declaró.
El fútbol suele dar giros inesperados y la historia de Bárbara es ejemplo de ello. Lo que en su momento fue un gol doloroso para Tigres Femenil, hoy queda como una anécdota, pues un año después, la delantera venezolana se convirtió en refuerzo auriazul para el Apertura 2025.
Con 22 años, Olivieri llega como una de las contrataciones más llamativas de Tigres Femenil, equipo que busca recuperar el protagonismo en la Liga MX Femenil. Su fichaje no solo refuerza la ofensiva, también confirma la apertura del futbol mexicano hacia jugadoras con experiencia en la NWSL, considerada una de las ligas más competitivas del mundo.
Te podría interesar
Nacida en Texas, pero de raíces venezolanas, Olivieri ha defendido a la Vinotinto desde categorías juveniles hasta la selección mayor, donde ha sido una de las piezas más constantes en los últimos años. En México dejó huella breve, pero significativa con Rayadas de Monterrey, donde jugó una temporada antes de dar el salto al Houston Dash en 2024.
Su paso por la NWSL le permitió consolidarse como una atacante desequilibrante, con capacidad para moverse en distintos frentes ofensivos y aportar goles en momentos clave. Precisamente esa combinación de juventud, experiencia internacional y talento es lo que llamó la atención de Tigres Femenil para sumarla a su plantel.
El contraste es inevitable: aquella futbolista que un día marcó un gol contra Tigres Femenil ahora defenderá los colores auriazules. Sin haber sido un sueño personal vestir esta camiseta, la llegada de Bárbara Olivieri demuestra la manera en que el destino futbolístico puede cambiar de un año a otro.
Lo que en julio de 2024 fue una anotación celebrada en Houston y sufrida en Monterrey, hoy se transforma en un recuerdo que enmarca el inicio de una nueva etapa. Tigres Femenil confía en que aquella rival convertida en refuerzo pueda ser ahora protagonista de triunfos vestidos de auriazul.
Suscríbete aquí al newsletter de ABC Deportes, "LA JUGADA DE LA SEMANA" y recibe la mejor información deportiva todos los viernes.