Monterrey.- El Congreso local ejerció violencia política institucional en contra de la emecista Rosaura Guerra al no tomarle protesta como diputada, determinó la Sala Regional Monterrey del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
“Se acredita la existencia de violencia política institucional o en su modalidad institucional, con la declaración jurídica de responsabilidad del Congreso del Estado de Nuevo León (como institución) por las acciones ejecutadas y omitidas por sus agentes directos y calificados, órganos de dirección y gobierno -entre ellos, la Mesa Directiva-, quienes tenían la responsabilidad de realizar las acciones (…) para que la suplente tomara protesta en funciones de propietaria”, dice la sentencia del Tribunal.
Guerra, en un principio, había denunciado violencia política en razón de género, situación que fue descartada por las autoridades. No obstante, en su lugar, se determinó que el Congreso como institución violentó a la emecista suplente de Alhinna Vargas.
“Nosotros habíamos presentado una denuncia por violencia en virtud de género. Sin embargo, el Tribunal fue más allá y, en forma unánime, saca una sentencia en la cual resuelve que había una violencia política institucional”, dijo Rosaura Guerra en entrevista para ABC Noticias.
De acuerdo con Guerra, esta resolución por parte del Tribunal se trata de la primera en su tipo a nivel nacional. “Aquí lo importante es que es la primera sentencia, a nivel nacional, que se dicta como violencia política institucional”, agregó.
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Se solicitó al diputado presidente Ricardo Canavati para conocer su posicionamiento respecto a la resolución, pero aseguró que todavía se encuentra analizándolo con el equipo jurídico del Legislativo.
“El área jurídica del congreso está analizando las resoluciones para responder y hacer lo correspondiente al respecto”, respondió para ABC Noticias Ricardo Canavati, presidente del Congreso de NL .
El pasado 23 de abril, la diputada vicepresidenta Tabita Ortiz le tomó protesta a Guerra tras más de siete meses de conflicto con la oposición respecto a esa curul.
Posteriormente, el Tribunal Electoral local validó dicha toma de protesta, a pesar de que la priista anteriormente propietaria del cargo se presentó en el recinto legislativo el 24 de abril.
La integración oficial de Guerra como diputada convertiría a MC en la primera fuerza en el Congreso local, pudiendo así reclamar la presidencia de la Comisión de Coordinación y Régimen Interno.