Monterrey.- A 45 días de que la presa Cerro Prieto no ha dado ni una gota de agua a la ciudad, una tercera fecha de entrega de las reparaciones fue incumplida por Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey, pues aunque la paraestatal había informado a la Conagua que podrían terminarlas el viernes 2 de agosto, el acueducto del embalse linarense seguía ayer detenido.
Mientras tanto, Cerro Prieto está reventando de agua que no ha podido ser bebida por los regiomontanos debido a la inundación en su Planta de Bombeo Número Dos, así como a la explosión de una tubería.
La entrega de las reparaciones por parte de Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey, primero, había sido estimada para el 7 de julio y después para el 18 de julio.
El pasado 19 de julio, una tercera fecha de entrega estimada de las reparaciones fue revelada a ABC Noticias por Luis Carlos Alatorre, director del Organismo de Cuenca Río Bravo de la Conagua: dos semanas, que se cumplieron el pasado viernes.
“Hablando con el Gobierno del Estado, ya están a marcha forzada. Están a días de empezar a operar el acueducto Cerro Prieto-Monterrey. Aproximadamente, me hablaron de dos semanas”, dijo Alatorre.
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Cuando el embalse ubicado en el municipio de Linares superó el cien por ciento de su capacidad de almacenamiento, el pasado 10 de julio, se volvió urgente para las autoridades desfogarla.
Ya para el 19 de julio, no se podía esperar ni un momento más, por lo que Alatorre en persona acudió a supervisar la apertura de la compuerta que, mediante un canal derivador, envió el excedente del vital líquido a la presa Los Mimbres, en el municipio de General Terán, durante 11 días.
Asimismo, el 29 de julio, el gobernador Samuel García dio a conocer que el agua del río Potosí dejaría de ser trasvasada a Cerro Prieto que ya no puede almacenar más para seguir su curso hacia la nueva presa Libertad.
El 2 de agosto llegó la semana pasada, cumpliéndose así el último plazo estimado por Agua y Drenaje para reanudar la extracción en Cerro Prieto. Sin embargo, hasta el momento, la paraestatal que encabeza Juan Ignacio Barragán no ha dado ni una señal de que eso vaya a suceder pronto.
Si bien, el embalse linarense ya no está recibiendo el agua que estaba siendo trasvasada del río Potosí, podría aumentar sus ingresos si llegan más lluvias, regresando el riesgo de que su excedente termine en el mar al ser desfogado, en caso de que la presa Los Mimbres ya esté llena.
“Ya no habrá lluvia los siguientes 15 días”, celebró García el pasado martes.