Monterrey.- Nuevo León se pone a la par de las grandes capitales verdes del mundo. El proyecto Bosques Ciudadanos, implementado por la Secretaría de Medio Ambiente de Nuevo León, liderada por Raúl Lozano Caballero, ha convertido al estado en un referente internacional en materia de reforestación urbana.
Con un 93.3 por ciento de avance y 933 mil 627 árboles plantados en tan sólo cuatro años, la entidad se coloca a la altura de ciudades como Sidney, París, Singapur o Nueva York, reconocidas por integrar bosques urbanos y corredores verdes dentro de su infraestructura.
“Hoy somos el estado en el mundo que más avanza en arbolado urbano y reforestación. Insisto, es un récord tener mil 500 árboles plantados por mes”, destacó Raúl Lozano Caballero, titular de Medio Ambiente.
El programa forma parte de la visión del Gobierno del Nuevo Nuevo León, encabezado por el gobernador Samuel Alejandro García Sepúlveda, para consolidar una metrópoli más habitable, verde y resiliente al cambio climático, en vísperas del Mundial 2026, donde la ciudad será sede de partidos internacionales.
Se tiene como meta plantar un millón de árboles autóctonos y plantas, objetivo que será rebasado por mucho, sostuvo el responsable de Medio Ambiente en Nuevo León.
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“Este proyecto estará concluido para el Mundial 2026. Así se empieza a ver una ciudad más verde y con mejor entorno para recibir a los visitantes de todo el mundo”, aseguró Lozano.
Bosques del Agua y Bosques Urbanos: dos vertientes, un mismo propósito
El programa se divide en dos grandes componentes: Bosques Urbanos, enfocados en avenidas, camellones, parques y plazas de la Zona Metropolitana, y Bosques del Agua, dirigidos a la restauración de ecosistemas serranos y recarga de acuíferos.
“Los Bosques del Agua ayudan a capturar y recargar los mantos acuíferos del Parque Nacional Cumbres, mientras que los Bosques Urbanos mitigan las islas de calor y mejoran la calidad del aire”, explicó el funcionario.
Gracias a la siembra constante en vialidades principales como Morones Prieto, Constitución, Félix U. Gómez, y la Autopista al Aeropuerto, así como en parques como la Alameda y Libertad, el paisaje urbano de la entidad se está transformando en un pulmón verde metropolitano.
Una comunidad que adopta el verde
Adicional al proyecto, se implementó también la campaña “Ayudamos con más árboles”, mediante la cual la ciudadanía puede adoptar especies nativas y frutales, promoviendo una cultura ambiental activa desde los hogares.
Hasta la fecha, el esquema ha otorgado en adopción alrededor de 10 mil árboles, de más de 30 mil que se planean regalar a la población.
“Queremos que los niños crezcan junto a su árbol y aprendan el valor de cuidar el entorno. Es una forma de educar desde la raíz”, resaltó Lozano Caballero. El impacto del programa Bosques Ciudadanos ya se traduce en una reducción de temperatura en zonas urbanas, una mejor calidad del aire, el retorno de especies de fauna, y una mejor salud mental y física para los habitantes.
“Caminar bajo la sombra o ver un entorno más verde da paz y tranquilidad. Éste es el proyecto de arbolado urbano más ambicioso del mundo”, concluyó el secretario.