Monterrey.- Después de que se dieran a conocer denuncias mutuas entre el exgobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón y su exesposa Adalina Dávalos, esta última negó que exista una pelea por una propiedad en el municipio de García.
A través de un comunicado publicado en redes sociales, Dávalos señaló que la situación no se trata de un conflicto material, sino de garantizar su bienestar y el de sus hijos.
“No se trata de una pelea por una casa, sino de un acto de dignidad, de amor propio y de protección hacia mis hijos”, expresó.
En el documento, la exprimera dama de Nuevo León mencionó que durante años enfrentó situaciones de violencia y control durante su matrimonio, las cuales prefirió mantener en silencio por temor e intimidación.
“Hoy, por mí y por mis hijos, he decidido recuperar mi voz. Ya no como la esposa de un exgobernador, sino como una mujer y una madre que se defiende, que busca verdad y que exige respeto”, plasmó.
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Aseguró que reducir el conflicto a un tema patrimonial minimiza el trasfondo de abandono y violencia que, según ella, vivió junto con sus hijos. Indicó que busca el reconocimiento a su esfuerzo y el derecho de sus hijos a tener una relación basada en el respeto y la verdad.
Dávalos también afirmó que su exesposo decidió poner fin al matrimonio, pero no así a las responsabilidades morales y afectivas derivadas de haber formado una familia.
“No estoy reclamando lo que no me corresponde; estoy reclamando el derecho a que se reconozca el esfuerzo, la entrega y la vida compartida”, apuntó.
En su mensaje, reiteró que su postura no responde al interés por un bien material, sino a la búsqueda de justicia.
