Monterrey.- Diputados del PRI y PAN criticaron que Agua y Drenaje de Monterrey no haya realizado el cobro del adeudo millonario que mantiene Pemex con la paraestatal, lo que, aseguraron, evitaría la necesidad de nuevas deudas y permitiría atender problemas operativos y ambientales pendientes.
El diputado priista Javier Caballero señaló que, pese a que el adeudo de Pemex ronda los 400 a 500 millones de pesos, la dependencia estatal ha optado por solicitar endeudamiento adicional, situación que atribuyó a una aparente resistencia del gobierno estatal a confrontar a la Federación.
Caballero recordó que durante las discusiones del Consejo de Administración de Agua y Drenaje se planteó la posibilidad de recuperar recursos a través de la venta de activos, la gestión del IVA pendiente —que estimó en más de 300 millones de pesos— y el cobro directo a Pemex. Sin embargo, dijo, no se actuó en esa dirección.
El legislador afirmó que la empresa productiva del Estado “goza de un trato privilegiado” al ser considerada instalación estratégica, lo que dificulta la aplicación de medidas de cobro o sanción que sí se ejercen contra el sector privado.
"Si tiene un cobro eficiente no ocuparían deuda, pero al final pareciera que hubiese una subordinación del gobierno federal.
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"También se deberían ir ajustando tuercas, ya que la gente de Nuevo León pasa a segundo término", manifestó el legislador.
Agregó que esta situación termina perjudicando a la ciudadanía ante el deterioro financiero de la paraestatal y el incremento de tarifas.
Además, criticó que la Secretaría de Medio Ambiente haya ampliado hasta por dos años el plazo para que la refinería de Pemex resuelva deficiencias en sus filtros, a pesar de que el problema persiste desde el inicio de la actual administración estatal.
Por su parte, la diputada panista Claudia Caballero cuestionó tanto el manejo administrativo de Agua y Drenaje como la falta de acciones para remediar daños ambientales atribuibles a la refinería. Señaló que el nuevo director de la paraestatal heredó una situación complicada, pero afirmó que las fallas eran conocidas desde años atrás.
La legisladora expresó preocupación por la falta de información clara sobre el suministro de agua a Pemex y adelantó que la revisión de la cuenta pública permitirá conocer el estado real de las finanzas de la empresa. Afirmó que la crisis hídrica que aún afecta a colonias y municipios del estado resulta incongruente con la condición de Nuevo León como sede mundialista.
"Le entregaron una papa caliente al nuevo director, aunque ya estaba enterado. Nos preocupa el tema administrativo, ya lo revisaremos en las cuentas públicas que nos hagan llegar y no estamos de acuerdo en cómo se ha manejado esta situación", manifestó la panista.
Caballero advirtió que el tema del adeudo de Pemex no debe convertirse en una distracción y sostuvo que existen problemas locales en materia de agua y medio ambiente que requieren atención inmediata. También consideró que, aunque la reubicación de la refinería es un asunto complejo, se deben revisar las condiciones actuales de operación, el uso de combustóleo y la falta de inversión para modernizar sus procesos.
Ambos legisladores coincidieron en que el gobierno estatal debe asumir una postura firme frente a la Federación para atender los adeudos y las obligaciones ambientales de Pemex, ya que las omisiones actuales están generando afectaciones directas para la población de Nuevo León.