Monterrey.- La industria de Nuevo León sufre un déficit de hasta 40,000 técnicos especializados cada año, una brecha que desde 2020 se ha convertido en un obstáculo para mantener la competitividad del sector, reveló la Caintra.
El estado cuenta con un alto nivel de especialización en sus procesos de producción que se ha denominado industria 4.0 y es de los más modernos del país, pero demanda personal con habilidades especiales y el 85% de los socios de la cámara de industriales reporta rezago para encontrarlo.
Al cierre de cada año, las empresas reportan un promedio de 40,000 vacantes sin ocupar, y de acuerdo con Caintra, el déficit no sólo radica en la escasez de perfiles técnicos, sino también en la falta de preparación adecuada frente a las exigencias de la industria 4.0, también conocida como la cuarta revolución industrial.
Esta industria 4.0 destaca porque hay transformación digital mediante la integración de tecnologías, sistemas y dispositivos, la automatización inteligente, el análisis de datos en tiempo real y el uso de inteligencia artificial y robótica en los procesos de producción y fabricación.
Jesús Francisco López Molina, director de Relaciones Institucionales de Caintra, explicó que esta carencia se visibilizó con mayor claridad tras la pandemia, pero venía gestándose desde años atrás.
Te podría interesar
“Después de la pandemia comenzamos a ver que teníamos esta falta de 40,000 técnicos por año para el sector industrial. No es nuevo, pero se ha venido agravando”, señaló López Molina en entrevista con ABC Noticias.
Esta problemática se refleja en datos duros: tres de cada 10 empresas industriales en el estado reportan dificultades para contratar personal técnico en áreas clave como producción, mantenimiento e inspección de calidad, y el 85% reconoce dificultades para cubrir vacantes operativas.
Además, las empresas indican que tardan en promedio 57 días naturales para encontrar al técnico adecuado, lapso que se extiende hasta 68 días en el caso de las microempresas, lo que genera retrasos operativos, curvas de aprendizaje prolongadas y mayores costos de capacitación.
“Por un lado, no conseguimos técnicos suficientes y, por otro, hay muchos jóvenes que no estamos capacitando para acceder a estos empleos, que son formales, mejor pagados y con posibilidades de crecimiento”, expresó el organismo empresarial.
La problemática cobra aún más relevancia en el contexto actual de nearshoring, fenómeno que ha detonado una oleada histórica de inversiones en el estado y que incrementa exponencialmente la necesidad de mano de obra calificada.
Desde la óptica de Caintra, los empleos del futuro inmediato estarán concentrados en perfiles con mayor capacitación técnica, educación formal y habilidades digitales, elementos que hoy escasean en amplios sectores de la población.