Ciudad Victoria. - El estado de Tamaulipas enfrenta una crisis multifacética, marcada por una sequía extrema que afecta al 80 por ciento de su territorio, impactando severamente en el suministro de agua y en el sector agrícola.
Según el Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), 34 de los 43 municipios de Tamaulipas están experimentando algún nivel de sequía, con situaciones que van desde la sequía moderada hasta la excepcional, abarcando el 79.1 por ciento del territorio estatal.
Esta situación ha llevado a niveles críticos en las presas del estado, con la mayoría reportando almacenamientos por debajo del 40 por ciento de su capacidad.
La presa Vicente Guerrero, en particular, registra un alarmante ocho por ciento de almacenamiento.
La escasez de agua se agrava con la segunda ola de calor que azota la región, con temperaturas alcanzando sensaciones térmicas superiores a los 50° centígrados.
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Se pronostican al menos cinco olas de calor más para este año, exacerbando la necesidad de medidas preventivas por parte de las autoridades de salud.
Además del impacto en el suministro de agua, la sequía ha desencadenado una crisis en el sector agrícola, con pérdidas significativas en los cultivos y conflictos recurrentes con el gobierno de Nuevo León por la disputa del agua.
En medio de esta compleja situación, se intensifican los riesgos de incendios forestales debido a las condiciones de sequía y altas temperaturas, lo que representa una amenaza adicional para la seguridad y el bienestar de la población.
Las autoridades hacen un llamado a la población a tomar medidas precautorias, como mantenerse hidratado, evitar la exposición prolongada al sol y colaborar en la conservación del agua, en un esfuerzo conjunto para hacer frente a esta crisis que afecta a toda la región.