Ciudad de México.- En una sesión marcada por fuertes intercambios entre bancadas, el Senado de la República aprobó reformas a la Ley General de Salud que prohíben totalmente la producción, comercialización, importación y exportación de cigarrillos electrónicos, vapeadores y dispositivos análogos en todo el país. El dictamen, que también veta cualquier forma de publicidad o propaganda en medios impresos, digitales, radiofónicos o televisivos, se aprobó con 76 votos a favor y 37 en contra y fue turnado al Ejecutivo federal para su promulgación.
La reforma fortalece la atención de la salud pública ante los riesgos que representan estos productos, especialmente entre adolescentes. Durante la discusión, el presidente de la Comisión de Estudios Legislativos, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, sostuvo que la evidencia científica demuestra un crecimiento acelerado del consumo de vapeadores entre jóvenes, pese a contener nicotina y sustancias tóxicas que dañan pulmones y sistema cardiovascular. Subrayó que el Estado “cumple su obligación de prevenir riesgos” y aclaró que la ley no criminaliza a los usuarios, sino a quienes introducen estas sustancias nocivas en el mercado.
La oposición votó en bloque contra la iniciativa. Legisladores del PAN señalaron que la prohibición abrirá la puerta al crimen organizado, al advertir que los usuarios continuarán buscando los productos en mercados clandestinos. La senadora Gina Gerardina Campuzano acusó que la mayoría impulsa una medida que “envenenará a la juventud” al trasladar la venta de vapeadores “al sótano del narcomenudeo”.
Por su parte, la senadora priista Carolina Viggiano solicitó suspender la discusión al considerar que la minuta contiene elementos “confusos”, sin evidencia técnica ni análisis de impacto regulatorio, lo que calificó como “una caja negra”. Desde Movimiento Ciudadano, el senador Luis Donaldo Colosio advirtió que la prohibición incentiva el mercado ilegal y recordó que tampoco ha evitado la venta de cigarrillos a menores.
La panista Mayuli Latifa Rodríguez fue más allá y propuso declarar a los cárteles del narcotráfico como grupos terroristas ante la presunta responsabilidad que asumirían en la distribución ilegal de vapeadores.
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En respuesta, Huerta Ladrón de Guevara afirmó que la reforma contempla acciones paralelas como reforzar la fiscalización del comercio ilícito, implementar campañas preventivas dirigidas a jóvenes y ofrecer programas de cesación basados en evidencia para adultos fumadores. La senadora del PVEM, Rocío Corona Nakamura, defendió la prohibición al señalar que busca frenar “una epidemia silenciosa” compuesta por más de 200 sustancias tóxicas presentes en los vapeadores.
Todas las reservas de la oposición fueron rechazadas y la minuta enviada por la Cámara de Diputados fue aprobada sin cambios, en medio de un tenso cierre marcado por un enfrentamiento verbal entre el morenista Miguel Ángel Yunes y el panista Marko Cortés. Con ello concluyó el primer periodo del segundo año de la legislatura, aunque la presidenta del Senado dejó abierta la posibilidad de sesionar antes del 15 de diciembre si surgiera alguna emergencia.