Escobedo.- El aseguramiento de 30 mil litros de hidrocarburo extraído de manera ilegal marcó el inicio de un operativo federal realizado en el municipio de Escobedo, donde autoridades inhabilitaron una toma clandestina conectada directamente a un inmueble particular.
La intervención formó parte de una investigación por presunto huachicoleo que encabezó la Fiscalía General de la República (FGR) a través de la Fiscalía Especializada de Control Regional en Nuevo León.
De acuerdo con la dependencia, el cateo fue autorizado por un juez federal luego de que Petróleos Mexicanos (Pemex) reportara irregularidades detectadas durante labores de mantenimiento en el poliducto Cadereyta–Satélite. Personal del Sector Ductos Monterrey confirmó la presencia de una conexión ilícita a la altura del kilómetro 3+940, misma que, a través de un túnel subterráneo, llegaba hasta un predio privado ubicado en la zona.
Con esta información, la Policía Federal Ministerial, respaldada por elementos del Gabinete de Seguridad del Gobierno de México, se desplegó en la propiedad señalada. En el operativo participaron integrantes de la Secretaría de la Defensa Nacional, Secretaría de Marina, Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y Guardia Nacional, quienes ingresaron al sitio para asegurar evidencia relacionada con el desvío y almacenamiento del combustible.
Dentro del inmueble, los agentes localizaron un vehículo semirremolque con un tanque metálico cargado con los 30 mil litros de hidrocarburo. También encontraron una manguera conectada a la toma clandestina, dos extractores y otra línea de alta presión empleada presuntamente para sustraer el combustible desde el ducto de Pemex. Técnicos de la paraestatal procedieron de inmediato a deshabilitar la derivación para impedir que siguiera funcionando.
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Tanto el hidrocarburo como el equipo utilizado para la extracción, además del propio inmueble intervenido, fueron puestos a disposición del Ministerio Público Federal, que continuará integrando la carpeta de investigación. La FGR señaló que, una vez concluidas las diligencias, procederá a ejercer acción penal contra quienes resulten responsables de la operación ilegal.
La autoridad federal destacó que la indagatoria comenzó días antes del cateo, tras recibir una denuncia formal que alertaba sobre la existencia de un posible punto de extracción irregular en la zona norte del área metropolitana. El reporte coincidió con los hallazgos del personal de Pemex, quienes descubrieron la conexión a través del túnel que dirigía directamente al predio cateado.
Las autoridades informaron que este tipo de tomas clandestinas representa un riesgo significativo tanto para los habitantes de las zonas aledañas como para los propios trabajadores que operan los ductos, debido al alto potencial de explosiones o fugas masivas. Asimismo, recalcaron que los operativos continuarán en distintos puntos del estado como parte de la estrategia nacional contra el robo de hidrocarburos.
El Ministerio Público mantiene bajo resguardo todo lo asegurado y avanza en el análisis de peritajes y testimonios para identificar la red involucrada en la extracción.