Ciudad de México. - Hace casi un mes que Miguel Bosé vivió uno de los momentos más aterradores de su vida, cuando se metieron a la casa que habita en la Ciudad de México para saquearla.
Durante una entrevista con un programa español, el cantante rompió el silencio y dijo que los ladrones le pidieron tomarse una selfie para el recuerdo, cuando ya habían terminado de robar la casa.
“En un determinado momento, se me queda el jefe mirando y dice: ‘Chavos, es Miguel Bosé’. Se quitó la máscara y me dijo que era mi fan, e incluso me pidió que nos tomáramos una selfie”, dijo por primera vez desde que ocurrió el evento en el que sus hijos, Diego y Tadeo de 12 años de edad, fueron amarrados por los asaltantes que se llevaron dinero y joyas.
El intérprete de “Como un loco” y “Morena mía", destacó que los asaltantes no eran profesionales debido a la manera en que realizaron el atraco y tras haberle pedido una foto.
“Al final nos ataron con los lazos de mis deportivas (tenis), o sea, me quedé sin lazos de mis deportivas. Sin zapatillas, ellos arrancaron todo y tuvimos que cortarlas”, señaló.
Miguel Bosé tomó el robo con sentido del humor y bromeo con una gama de maletas y monederos que le habían regalado y que no le gustaban, agradeciéndoles por habérselos llevado.
“Además, desde aquí quiero agradecerles una cosa. Tengo dos amigas californianas fans de toda la vida que cada Navidad, cumpleaños o fiesta me regalan objetos que a ellas les apasionan y yo detesto. Una gama alta de maletas y monederos. Pues se las llevaron todas, así que muchas gracias”.
Además, mencionó que él y su familia estaban rodeados de al menos 30 personas armadas, quienes le dejaron su domicilio completamente desordenado, el cual duró así por tres días hasta que arribaron las autoridades.
“Fueron casi peores ellos que el atraco. Tenían muy buena voluntad, pero eran 30 y estaban más armados que los otros”, comentó.