Monterrey.- Luca, la marioneta gigante que en su momento fascinó a miles de niños y causó temor a otros, podría ser restaurada para el Mundial de 2026, tras permanecer más de 13 años almacenada en la bodega de Ánima Studios desde 2012.
De acuerdo con fuentes cercanas al estudio, ya existen planes para su restauración, aunque las conversaciones continúan debido a los elevados costos que esto implicaría.
Se contempla una colaboración con la Secretaría de Cultura de Nuevo León para concretar un acuerdo que permita revivir esta pieza artística.
En entrevista para ABC Noticias, Victoria Kühne, presidenta del patronato del Festival Internacional de Santa Lucía, reveló que estuvo buscando a la marioneta, ya que muchas personas le preguntaban si podría presentarse en esta edición del festival, hasta que finalmente dio con su paradero.
"Desde el año pasado la había estado buscando y la encontramos. Es lo único que les puedo decir: que la estuve buscando", comentó Kühne.
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Un encargado del proyecto recordó hace tiempo que en 2012 Luca fue concebido originalmente para realizar 80 presentaciones durante el Fórum Universal de las Culturas, pero terminó participando en más de 200.
“Cuando se fabricó Luca, la idea era que se presentara en unas 80 funciones del Fórum; sin embargo, terminó superando las 200”, señaló.
También detalló que en aquella época el costo por presentación rondaba los 150 mil pesos, debido a los gastos de grúa, seguros, montaje, desmontaje y el pago de entre 12 y 13 trabajadores necesarios para manipularla.
Sin embargo, advirtió en su momento que la marioneta requería un mantenimiento integral, pues varias de sus piezas ya mostraban deterioro.
“Cada presentación costaba cerca de 150 mil pesos por todos los procesos que implicaba. Hoy, con el estado en que se encuentra, necesitaría una restauración completa porque muchas partes están muy desgastadas”, puntualizó.
Con más de siete metros de altura y un peso aproximado de 800 kilogramos, Luca representaba a un niño de 13 años que transmitía mensajes de paz a la infancia.
Sus funciones en el Parque Fundidora llegaron a reunir a más de 290 mil personas, aunque cada presentación exigía una fuerte inversión y el trabajo coordinado de alrededor de 12 operadores.
En aquel entonces, el Gobierno de Nuevo León destinó cerca de 468 mil pesos para asegurar los derechos y la creación de esta marioneta.