Ciudad de México. – En los últimos días la ciudadanía de Nuevo León encendió los focos de alerta a propósito de una doble muerte presuntamente relacionada por comer pollo asado en mal estado.
Sucedió en Escobedo, y las víctimas fueron dos hermanitos, una niña y un niño, quienes fallecieron horas después de ingerir este alimento adquirido en el Día de las Madres, y que también causó estragos a su padre, quien fue enviado al hospital por intoxicación.
Por ello, la población ha puesto la lupa sobre el pollo y todos aquellos platillos que pueden echarse a perder de manera casi instantánea debido a, entre otras cosas, las altas temperaturas que sobrepasan los 40° centígrados.
¿Cómo saber si el pollo está en mal estado?
Si compraste un pollo asado y quieres saber si está en buen estado para proceder a consumirlo, debes tener en cuenta algunos signos que evidencian las condiciones del alimento.
- Las piezas de pollo son de color grisáceas o blanquecinas.
- Desprende un fuerte olor parecido al amoniaco, amargo y desagradable al sentido del olfato.
- La textura de la carne de pollo es pegajosa o viscosa.
- Las piezas están cubiertas por una capa verde o negra, lo cual es moho.
El pollo congelado también puede caer en mal estado, y esto es posible identificarlo si notas lo siguiente:
Te podría interesar
- Una capa de hielo sobre las piezas de pollo.
- Si tiene quemaduras por el congelador, por lo general lucen en forma de marcas color blancas.
- Si el color del pollo es grisáceo o amarillo.
El calor acelera la descomposición de los alimentos como el pollo
La Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés), señala que las carnes deben de mantenerse en refrigeración, de lo contrario, bastarán dos horas para que comiencen a perder su calidad.
Sin embargo, cuando las temperaturas son por demás calurosas, mayores a 30° o 35° centígrados, con una hora afuera del refrigerador, el pollo o cualquier tipo de carne se echará a perder.