Ciudad de México.- La diputada de Morena, Elizabeth Mateos, presentó una iniciativa que podría redefinir los términos del divorcio en la Ciudad de México.
¿Qué busca esta propuesta?
Bajo el nombre “Traición, cero liquidación”, la propuesta plantea que el cónyuge que incurra en infidelidad, abandono o violencia pierda el derecho a la liquidación patrimonial común en matrimonios celebrados bajo el régimen de sociedad conyugal.
Actualmente, divorciarse en la capital del país es un trámite que no requiere demostrar conductas inapropiadas. Sin embargo, la diputada considera que esta neutralidad patrimonial es injusta para quienes mantuvieron el vínculo mientras la otra parte vulneró la relación.
“Quien ama, comparte; quien respeta, construye; pero quien traiciona, debe perder”, expresó la legisladora.
Añadió que su propuesta busca promover valores de respeto y responsabilidad dentro del matrimonio.
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¿Qué cambios propone la iniciativa?
De aprobarse, la iniciativa modificaría el artículo 267 del Código Civil de la Ciudad de México, otorgando a los jueces la facultad de investigar y determinar si existieron faltas graves como infidelidad, abandono o violencia.
En caso de comprobarse, el responsable perdería sus derechos sobre los bienes compartidos.
“El objetivo es claro, en la Ciudad de México la violencia no se premia, la infidelidad no se recompensa, el abandono no se tolera y la traición no se paga con la mitad del patrimonio”, señaló Mateos al presentar su iniciativa ante el pleno del Congreso capitalino.
Contexto social y jurídico
La propuesta surge en un contexto donde los divorcios en la capital se han incrementado más del 30 por ciento en la última década, mientras que la violencia de pareja afecta a cerca del 40 por ciento de las relaciones. Estos datos, según la diputada, evidencian la necesidad de replantear los mecanismos legales que regulan las rupturas matrimoniales.
Mateos también citó estudios sociológicos y teorías evolutivas que explican cómo, tras una traición o infidelidad, las personas, especialmente las mujeres, desarrollan una mayor capacidad para detectar engaños. Pese a que las estadísticas muestran índices similares de infidelidad entre hombres y mujeres, los impactos emocionales y patrimoniales son distintos.
La iniciativa fue turnada a la Comisión de Administración y Procuración de Justicia del Congreso local, donde se analizará su viabilidad jurídica y social antes de ser votada en el pleno.
