Monterrey.- La victoria de Fátima Bosch como Miss Universo 2025, celebrada en Tailandia el pasado 21 de noviembre, marcó un logro histórico para México, pero también detonó una ola de controversias que han puesto bajo la lupa a la organización del certamen, al panel de jueces y a personajes clave relacionados con la ganadora.
Entre ellos, su padre, Bernardo Bosch Hernández, asesor del Director General de Pemex, y el empresario mexicano Raúl Rocha Cantu, actual presidente de Miss Universo.
¿Qué se sabe de la trayectoria del padre de Fátima Bosch?
Bernardo Bosch Hernández es ingeniero industrial con amplia formación académica y más de dos décadas de experiencia en puestos directivos dentro de Pemex.
El 30 de octubre de 2025 fue nombrado subdirector de Seguridad, Salud, Gestión Ambiental, Energética y Confiabilidad, uno de los cargos más relevantes en la petrolera.
Sin embargo, no toda su trayectoria ha estado libre de polémica. En 2019, la Secretaría de la Función Pública lo inhabilitó por diez años por presunto enriquecimiento ilícito, e incluso Pemex confirmó su destitución.
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Años después, el Tribunal Federal de Justicia Administrativa declaró la nulidad de la sanción al señalar que la medida carecía de fundamento legal, por lo que su nombre fue retirado del registro de servidores públicos sancionados.
Aunque su carrera ha sido reconocida, su vínculo con Raúl Rocha Cantú tomó fuerza mediática tras la victoria de su hija, alimentando las especulaciones de conflicto de interés.
¿Por qué surgieron señalamientos de conflicto de interés?
Tras la coronación, crecieron las especulaciones debido a la presunta relación empresarial entre Raúl Rocha Cantu y Bernardo Bosch.
Diversos medios señalaron que existían acuerdos comerciales previos entre ambos, lo que provocó cuestionamientos sobre la transparencia en los resultados del certamen.
La polémica escaló cuando el exjuez Omar Harfouch renunció tres días antes de la final y acusó públicamente que Fátima Bosch era una “falsa ganadora” ” y afirmó que la decisión final estuvo influenciada por presuntos intereses comerciales entre Raúl Rocha Cantú, presidente de Miss Universo, y Bernardo Bosch Hernández, padre de la ganadora.
Afirmó que varias personas lo presionaron para votar a favor de la mexicana por “conveniencia empresarial”, el empresario también aseguró que la selección de finalistas no fue transparente y que un “grupo improvisado” predefinió los resultados.
La organización negó categóricamente la existencia de un “jurado improvisado” o de presiones internas y Raúl Rocha, a su vez, aseguró estar dispuesto a enfrentar cualquier señalamiento público.
La controversia continúa creciendo mientras Harfouch promete revelar más detalles en un documental que se estrenará en 2026.