General Bravo.- El tradicional sabor de Xochimilco llegará al noreste del país este mes de abril, cuando las emblemáticas trajineras “La Bravia” y “La Bonita” comiencen a surcar las aguas del Río San Juan, en el municipio de General Bravo, como parte de una nueva atracción turística pensada para las familias regiomontanas.
Con el objetivo de ofrecer una experiencia diferente durante el periodo vacacional, el municipio apostará por un recorrido único que mezcla el encanto de las trajineras típicas de la Ciudad de México con los paisajes naturales de Nuevo León. La inauguración está programada para el Jueves Santo, 17 de abril, y marcará el arranque oficial de este proyecto impulsado por la alcaldesa Patricia Cantú.
“Queremos que General Bravo sea una nueva opción para quienes buscan disfrutar de la naturaleza sin salir del estado. Estas trajineras darán un toque de color, tradición y alegría a nuestro municipio”, destacó Cantú.
Los recorridos permitirán a los visitantes contemplar la flora y fauna del Río San Juan a bordo de estas embarcaciones pintadas a mano, que conservan los diseños típicos de Xochimilco y prometen una experiencia relajante, ideal para convivencias familiares o paseos en pareja.
Además de los paseos, se prevé que la iniciativa genere un impulso económico para la zona, atrayendo visitantes y beneficiando a comercios locales. Habrá venta de alimentos típicos en las cercanías del embarcadero, y se fomentará la participación de artesanos y emprendedores de la región.
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Con esta propuesta turística, el estado tendrá un nuevo destino de descanso y recreación, llevando un pedacito de la cultura del centro de México a las tierras del noreste.
La tradición de las trajineras en Ciudad de México
Las trajineras son una tradición centenaria de Xochimilco, en la Ciudad de México. Estas coloridas embarcaciones de madera han sido utilizadas desde la época prehispánica para recorrer los canales de la zona, que formaban parte del sistema lacustre del Valle de México. Hoy en día, las trajineras son símbolo de celebración, cultura y convivencia familiar. Decoradas con flores y nombres pintados a mano, ofrecen a los visitantes un paseo entre música, comida típica y un ambiente festivo que ha convertido a Xochimilco en un punto turístico emblemático y Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO.