Monterrey.- ¿Notas que tus plantas están perdiendo color o se ven tristes con el calor? Las olas de calor en Nuevo León afectan a las plantas tanto como a nosotros.
¿Lo bueno? Es que con un poco de atención y cuidado, puedes ayudarles a recuperarse y mantenerse verdes y bonitas. En esta nota te ayudamos a identificar qué necesitan tus plantas para sobrevivir a esos días cálidos.
¿Cómo identificar si tus plantas están sufriendo por el calor?
- Hojas marchitas o caídas: Es una de las señales más evidentes de falta de agua o estrés por calor. Las hojas pueden verse lacias incluso después de regar.
- Hojas amarillentas o descoloridas: Esto puede indicar falta de hidratación o quemaduras por el sol.
- Puntas o bordes de las hojas secos o quemados: Señal de que la planta está perdiendo demasiada agua o está expuesta a sol muy intenso.
- Enrollamiento de las hojas: Algunas plantas enrollan sus hojas para reducir la superficie expuesta al sol y así evitar la pérdida de agua.
- Crecimiento detenido: El estrés por calor puede impedir que la planta siga creciendo o produciendo nuevas hojas o flores.
- Flores marchitas o caída prematura de flores y frutos: La planta prioriza su supervivencia y puede detener la producción de flores y frutos.
- Tierra seca y caliente: Introduce un dedo en la tierra cerca de la base de la planta. Si está seca y caliente al tacto, necesita agua.
¿Qué necesitan tus plantas durante la ola de calor?
Una vez que identificas que tus plantas están sufriendo, o incluso para prevenirlo, los expertos recomiendan una serie de recomendaciones que van desde el riego adecuado hasta protección ideal.
Riego adecuado
Asegúrate de que el agua llegue a las raíces. Un riego superficial se evapora rápidamente. Además procura que sea un riego por la mañana o al atardecer, esto evita las horas de más calor para reducir la evaporación y evitar quemaduras en las hojas húmedas por el sol.
Asimismo, aumenta la frecuencia si es necesario especialmente las que están en macetas, ya que el sustrato se seca más rápido.
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Importante: Algunas plantas toleran mejor la sequía que otras. Investiga las necesidades específicas de tus especies.
Proporciona sombra
Si tus plantas están en macetas, colócalas en un lugar con sombra durante las horas más intensas del sol (generalmente entre las 11 a.m. y las 4 p.m.). Procura utilizar mallas de sombra o toldos en caso de no poder moverlas.
Consejo: Aprovecha la sombra natural colocando las plantas más delicadas cerca de otras más grandes que les proporcionen sombra.
Acolchado (Mulching)
Cubre la superficie de la tierra alrededor de tus plantas con una capa de material orgánico como paja, hojas secas, corteza de árbol o compost. Esto ayuda a retener la humedad en el suelo, reduce la evaporación y mantiene la temperatura del suelo más fresca.
Protege las macetas
Las macetas oscuras, especialmente las de plástico, pueden calentarse mucho bajo el sol y dañar las raíces. Por ello, coloca las macetas a la sombra o envuélvelas con materiales claros o aislantes.
Evita trasplantar y podar en exceso
Durante los días de intenso calor, los expertos recomiendan no trasplantar o podar en exceso ya que estos procesos pueden estresar a la planta. Es mejor posponerlos hasta que pase la ola de calor.
No fertilices durante el estrés por calor
El fertilizante puede aumentar el estrés de la planta cuando ya está sufriendo por el calor. Espera a que las temperaturas se moderen.
Aumenta la humedad ambiental (con precaución)
Algunas plantas se benefician de un aumento en la humedad. Puedes rociar ligeramente las hojas con agua temprano en la mañana o colocar las macetas sobre un plato con guijarros y agua (sin que la base de la maceta toque el agua). Sin embargo, ten cuidado de no crear un ambiente demasiado húmedo que favorezca la aparición de hongos.