México.- A más de 10 años del fallecimiento de Roberto Gómez Bolaños, una polémica declaración hecha por Carlos Villagrán, quien interpretó a Quico en El Chavo del 8, vuelve a causar revuelo.
En una entrevista pasada, el actor sugirió que la fecha oficial del deceso de Chespirito, anunciada el 28 de noviembre de 2014, podría no ser real.
Con el reciente estreno de la serie Sin querer queriendo, que revive la historia del legendario comediante, los fans han retomado una antigua entrevista en la que Villagrán expone detalles que lo hicieron sospechar que hubo algo extraño en la manera en que se manejó la noticia.

La entrevista que revivió la teoría de Villagrán
Durante una conversación con Dante Gebel, en el programa La Divina Noche, Villagrán relató cómo se enteró de la muerte de su excompañero: estaba en Texas cuando un periodista lo contactó para una entrevista, creyendo que ya sabía del fallecimiento.
Al escuchar la noticia, viajó de inmediato a México, y llegó justo cuando se realizaba una misa en Televisa San Ángel.
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Sin embargo, fue en ese momento cuando comenzó a notar cosas que no le pare
cieron normales. Según su testimonio, el homenaje masivo en el Estadio Azteca, realizado al día siguiente, le pareció demasiado preparado para haberse organizado en menos de 24 horas.
“No murió ese día”: la teoría del actor sobre Florinda Meza
Villagrán fue contundente al decir que, para él, Chespirito no murió el 28 de noviembre:
“Yo creo que murió mucho antes y Florinda fue de ‘aguántamelo’”.
Su argumento se basa en la logística del homenaje y el hecho de que, según afirma, el ataúd estaba vacío. Aunque admite no tener pruebas, cree que se ocultó la fecha real para no afectar algún proyecto televisivo.
¿Encubrimiento o coincidencia? El debate sigue vivo
Aunque la teoría no tiene respaldo oficial, ha generado conversación entre los seguidores del universo de Chespirito. La sospecha de Villagrán plantea dudas sobre el manejo del fallecimiento de una de las figuras más queridas de la televisión latinoamericana.
Por ahora, la versión oficial no ha sido desmentida, pero la inquietud persiste. La sombra de una verdad incompleta, según Villagrán, continúa flotando entre los recuerdos del legado de Chespirito.