Estados Unidos. - Una niña de 12 años fue acusada de asesinar a una prima de 8 años tras discutir por un iPhone en Tennessee, Estados Unidos.
Los hechos ocurrieron el pasado 15 de julio en un domicilio ubicado en Humboldt.
De acuerdo a las autoridades, una cámara de seguridad dentro del dormitorio de las niñas, registró el asesinato.
La grabación muestra a la niña mayor usando ropa de cama para asfixiar a su prima mientras esta dormía en la litera superior, según la declaración del fiscal de distrito de Gibson, Frederick Agee.
Posteriormente la menor, limpió a la víctima y la acomodó en la cama para no levantar sospechas.
Te podría interesar
Un familiar de las niñas, contó a la policía que ambas habían discutido por un iPhone después de venir de fuera de la ciudad para quedarse con su abuela.
“Considero que este es uno de los actos violentos más inquietantes cometidos ya sea por un adulto o un menor que mi oficina haya procesado”, escribió Agee en el comunicado.
La menor fue acusada de asesinato en primer grado y manipulación de pruebas después de que las autoridades obtuvieron el video el pasado miércoles.
El fiscal mencionó que pedirá a un juez, que la acusada que está por cumplir 13 años, sea procesada en un tribunal de adultos y tenga una sentencia más larga.
A Kevin le robaron el celular, planeó venganza y mató a una familia equivocada en EU
Un joven de Colorado, Estados Unidos, se declaró culpable por haber incendiado una casa, provocando la muerte de toda una familia inocente a quien había señalado de estar detrás del robo de su celular iPhone en agosto de 2020.
En ese entonces, Kevin Bui tenía 16 años de edad, y podría ser condenado a 60 años de prisión por ese hecho registrado en un vecindario de la ciudad de Denver.
El entonces adolescente dio con esa vivienda a través de una aplicación llamada “Find My iPhone”, a través de la cual rastreó su teléfono robado hasta la zona general, sin embargo, los datos fueron incorrectos y el joven se dejó llevar por ellos.
Lo anterior lo hizo en compañía de otros dos amigos, con quienes se movilizó al hogar donde supuestamente se hallaba su teléfono, y le prendió fuego, en un acto que arrojó un saldo de cinco personas muertas.