Monterrey.- Clientes de la sucursal del Pollo Matón ubicada en la Plaza Girasoles, sobre la avenida Raúl Salinas y cuyo producto habría sido ingerido, antes de morir, por dos hermanitos en Escobedo, aseguraron a ABC Noticias que ellos han comido regularmente de este producto y que no han enfermado, incluso, uno de ellos dijo que, al igual que los niños, consumió este producto el viernes 10 de mayo y que no presentó ningún problema de salud.
Ante el fallecimiento de dos menores de edad identificados como David de 3 años y Vanessa de 5 años de edad, presuntamente luego de haber consumido carne de pollo en mal estado la cual habrían comprado en este lugar, trabajadores de establecimientos cercanos a esta sucursal del Pollo Matrón, coincidieron en que no presentaron problemas de salud al consumir productos de este negocio, y aseguraron que factores como el tiempo de traslado del repartidor y las altas temperaturas pudieron ser pieza clave en este hecho.
En un recorrido realizado por ABC Noticias por la Plaza Girasoles, Antonio González, quien trabaja en un sitio de reparación de artículos de casa, justo a dos locales de la sucursal que ya fue suspendida por las autoridades, aseguró que las instalaciones nunca estaban en mal estado, y que ese viernes 10 de mayo muchas familias pasaban con paquetes de comida de ese restaurante.
“Yo he consumido (pollo matón) y créame que no he tenido ningún detalle, lamentablemente lo de los niños es trágico, pero también tendrían que ver la persona de la aplicación que llevó el pollo, cuánto tiempo se tardó tanto en llegar por el cómo el llevárselos y en cuanto tiempo se lo comieron, porque ese día hacía muchísimo calor.
“Ese día (10 de mayo) uno aquí está cerca y ve cómo la gente pasaba con el producto, muchísima gente lo llevaba, no quiero hablar mal, no decir cosas de más, pero está muy rara la situación (…) La verdad nunca vi mala higiene, yo ahí llevaba a mis niños, ahí jugaban en el área de juegos, muy bien todo, lo más así es que a veces no prenden el clima, me ha tocado entrar y está el calorón”, señaló Antonio González.
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Otro de los locatarios de esta plaza identificado como Samuel y que trabaja en una hierbería, aseguró que ese día 10 de mayo, su mamá y él compraron un paquete de pollo en la misma sucursal y no se enfermaron.
“Yo compré pollo también ese día (10 de mayo) comimos todos y es algo que hacemos regularmente y me parece un día trágico siendo día festivo, donde me imagino que tuvieron mucho trabajo, mucha venta”, mencionó Samuel.
Por su parte, Isabel García, quien trabaja en una estética que se encuentra al interior de la Plaza Girasoles aseguró que se sorprendió al ver la noticia debido a que ella y sus compañeras consumieron pollo ese mismo día y ninguna registró problemas de salud.
“Nosotros compramos (pollo) cada ocho días o entre semana hemos comprado y jamás hemos tenido una situación así, me sorprendí y dije cómo, si lo consumimos el día de la noticia, y cada sábado comprábamos cuando no traíamos lonche, y compramos mucho porque somos muchas trabajadoras el sábado”, sentenció Isabel.
De acuerdo a lo reportado inicialmente, la familia pidió alimento de esta sucursal a través de una aplicación, siendo Didi, la única que brindaba este servicio en esta establecimiento, el cual fue suspendido la tarde del domingo 12 de mayo por autoridades de la Policía de Escobedo y por la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León.