Monterrey.- La disputa entre las bancadas de Movimiento Ciudadano y el PRI-PAN-PRD por a quién le corresponde encabezar la Mesa Directiva significa que se vienen otros tres años de parálisis legislativa por la judicialización de las decisiones al interior del Congreso, coincidieron los activistas Gilberto Marcos y Liliana Flores Benavides.
“Este fue el primer round de muchísimos que van a venir, porque dentro del Congreso se tienen que repartir la Tesorería, la Oficialía de Partes, etcétera, y va a haber más problemas.
“Ya dijeron que van a hacer denuncias penales en las primeras horas de su instalación como legislatura. Entonces van a venir otros tres años en donde las fuerzas en el Congreso no van a aportar nada”, dijo Flores Benavides en entrevista para ABC Noticias.
Por si lo anterior fuera poco, de acuerdo con Flores Benavides, los diputados de Morena desperdician la oportunidad de equilibrar las discusiones entre los emecistas y los opositores al aliarse con la bancada naranja.
Y es que, cabe recordar, al juntar la bancada de Movimiento Ciudadano con la de Morena, Partido Verde y Partido del Trabajo suman 21 curules, misma cantidad con la que cuenta el PRI-PAN-PRD.
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“El partido que podría mover la balanza, que es Morena, prácticamente se alió a Movimiento Ciudadano, y entonces ya tenemos 21 y 21. Aquí el que tendría que hacer un papel de bisagra no lo está haciendo.
“Parece ser que nos están anunciando una alianza, entonces, simple y sencillamente se va a radicalizar”, agregó la también ex diputada local.
Por su parte, el activista Gilberto Marcos consideró que, para evitar esta problemática en futuras ocasiones, debería modificarse la ley, a fin de que quede claro a qué partido le corresponden los cargos de la Mesa Directiva.
“La judicialización permanente estará presente durante los siguientes años por lo cerrada de la representación de los grupos parlamentarios. Ante la situación inédita que se presentó, deberían cambiar el reglamento para ser más precisos en casos similares”, comentó.