Monterrey.- La Secretaría de Medio Ambiente de Nuevo León ordenó la suspensión temporal de las operaciones en una planta recicladora ubicada en Linares y un taller de pintura en Monterrey, debido a serias omisiones en el cumplimiento de la legislación ambiental vigente.
Ambos cierres se llevaron a cabo este miércoles 16 de julio por la Procuraduría Estatal de Medio Ambiente, como parte de su estrategia para atender denuncias ciudadanas y garantizar condiciones adecuadas de salud y seguridad ambiental en el entorno.
En el municipio de Linares, las autoridades respondieron a una denuncia sobre una recicladora que almacenaba residuos de manejo especial y que, además de expedir olores desagradables, presentaba evidentes signos de insalubridad. Durante la inspección se constató la presencia de residuos orgánicos mal manejados y la proliferación de fauna nociva, incluso se halló un roedor vivo dentro del inmueble.
Más allá de las condiciones antihigiénicas, se detectó que la planta operaba sin los permisos correspondientes, incluyendo el de impacto ambiental y el de autorización para la compraventa de materiales reciclables. Ante las múltiples faltas, se ordenó la suspensión total de actividades hasta nuevo aviso.
Paralelamente, en la colonia Ferrocarrilera de Monterrey, la Procuraduría Ambiental inspeccionó un taller de pintura dedicado a la reparación de bicicletas y abanicos, tras recibir reportes vecinales por presuntos riesgos de seguridad. Los inspectores constataron que el horno de pintura se encontraba justo al lado de una vivienda y que en el interior del local había acumulación excesiva de objetos inflamables, lo que representaba un potencial peligro de incendio.
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Al igual que en Linares, se determinó que el taller no contaba con los permisos ambientales requeridos. En consecuencia, se impuso también la suspensión total temporal de operaciones y se instruyó una limpieza inmediata del lugar.
La Secretaría de Medio Ambiente reafirmó que continuará actuando con firmeza frente a cualquier actividad que comprometa el bienestar de la población o el equilibrio ecológico.
La dependencia hizo un llamado a los negocios y empresas a operar en cumplimiento con las normativas, para evitar sanciones y contribuir a un entorno más seguro y saludable para todos los habitantes del estado. De igual manera exhortó a la población a reportar cualquier situación que atente contra el medio ambiente o ponga en riesgo a la ciudadanía.